Desde el mes de mayo, cerca de 3 mil familias de Tambillos, sector rural ubicado en la comuna de Coquimbo, se han visto afectados por problemas en la continuidad del suministro de agua potable.
Esta situación se deriva de la disminución del caudal en los pozos que abastecen al APR de la localidad, como consecuencia de la sequía. Actualmente existe un déficit de 20,000 litros diarios por lo que se han establecido racionamientos, que provocan la inquietud y preocupación entre los ciudadanos a medida que se acerca la temporada estival.
El APR de Tambillos abarca 133 arranques que brindan servicio a aproximadamente 3 mil familias de la zona, a lo que suma la demanda de agua de la escuela, el jardín infantil y la posta rural. Estos servicios se ven amenazados por los continuos cortes en el suministro de agua, impactando a buena parte de la población del sector.
Según consignó Diario El Día, el cobro que realiza el APR a los usuarios por el servicio es mínimo, por lo que no existe la capacidad recursos económicos, que permitan adquirir agua de terceros para compensar la insuficiencia en el suministro del vital líquido para las comunidades.
Ante este escenario, dirigentes sociales se han dado a la tarea de buscar soluciones entre las distintas autoridades y solicitar el suministro de agua a través de camiones aljibes, lo cual hasta la fecha no se ha materializado.
“Desde el año pasado que estamos con un déficit de agua, teníamos dos pozos, uno de ellos se secó y ahora solo contamos con uno que no da abasto. Hemos llamado a todos los organismos correspondientes a la DOH, con el municipio que hizo una encuesta y han pasado los meses y hasta ahora no hemos tenido respuesta a nuestro requerimiento de que nos apoyen con camiones aljibes», explicó Gerald Bordones, dirigente del Servicio Sanitario Rural de la localidad.
«Acá la gente piensa que no estamos haciendo nada, pero hemos buscado todas las instancias para continuar con el servicio, estuvimos comprando agua, pero para un APR de escasos recursos no nos alcanza. Si seguíamos comprando agua en dos meses quedábamos en quiebra, porque necesitamos seguir pagando a los operadores, la luz y los suministros para que el sistema siga funcionando”, indicó al citado medio.
Familias viven con 4 horas de agua al día
Sobre las consecuencias del racionamiento, Bordones relató que al final del día ya no queda nada de agua para seguir con la distribución a la población.
“El pozo en la noche no alcanza a cargarse mucho, en invierno tuvimos un poco más de agua que nos permitía cargar un poco mas el pozo, pero ahora las napas ya bajaron su caudal. Ya no da más. Es una situación frustrante, porque nadie nos toma en cuenta. No nos dan solución. Tambillo es un pueblito donde también tenemos gente, hay niños chicos, hay escuelas, hay postas, no todo debe centralizarse en Coquimbo urbano, nosotros también necesitamos el agua”, planteó.
En opinión de Margarita Carvajal, una de las vecina del sector, la única forma para poder suplir la disminución en el caudal del pozo, es mediante el bastecimiento por acarreo de agua, “el sector de santa Cecilia que está en la parte alta de la localidad está aún más complicado, porque el agua llega sin presión, porque el estanque que tenemos, está más abajo y como no tiene el agua suficiente, no logra impulsar el agua con fuerza. Tiene que estar el estanque lleno para que el agua pueda subir hacia ese sector, pero producto de la sequía es casi imposible que se llene el estanque”, explicó.
Otra de las habitantes de la comunidad, Laura Araya, recordó que el que el problema del abastecimiento de agua se originó hace varios meses y sólo tienen acceso al vital líquido por un lapso de 3 a 4 horas al día.
“Nosotros que nos encontramos en el sector más alto, nos llega el agua tres a 4 horas al día y las personas que están en el centro le llega un chorrito de agua que no le alcanza ni para lavar, ni para bañarse, ni para que prenda el calefón. Es una situación difícil y no vemos soluciones de parte de dirigentes, ni de autoridades. Nosotros somos personas de bajos recursos y no tenemos la opción de comprar agua, porque es muy caro”, denunció.
El concejal de la comuna de Coquimbo, Guido Hernández, criticó la «lenta respuesta» que han tenido por parte del actual y los anteriores gobiernos, «respecto de una situación que ya afecta a familias completas».
«Se habla de sequía, pero vemos que no se toman acciones de emergencia, los vecinos requieren profundizar sus pozos, aumentar la capacidad de acumulación de estanques. San Ramón podría ser una alternativa, de manera de garantizar el acceso al agua para cientos de familia que ven como preocupación como pasa el tiempo y se hace cada vez más difícil poder ocupar los baños o cocinar”, señaló.
Investigadores advierten compleja situación para la Región de Coquimbo
Recientemente, Investigadores de la Universidad de Chile señalaron que, si bien es un alivio que las precipitaciones hayan marcado índices «normales» en este invierno después de 14 años de sequía, ello no resuelve el problema de crisis hídrica que hay en el país.
El director de Investigación de la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo de la U. de Chile, e investigador del Centro Avanzado Para Tecnologías del Agua (CAPTA), Rodrigo Fuster, explicó que el agua caída durante estos últimos tres meses ha ayudado a mejorar la situación de sequía histórica que el país vive desde hace más de una década.
Sin embargo, advirtió que se mantiene una situación muy crítica todavía en la Región de Coquimbo hacia el norte.
«El norte continúa con déficit de reservas hídricas y la zona más afectada es la Región de Coquimbo, donde, con siete embalses, el volumen actual de agua es menor al 20%», planteó.
Ayón García, también investigador de CAPTA, detalló que «en la Región de Coquimbo se aglomeran las cuencas que están más complicadas. En Copiapó hay una sobrexplotación porque hay muchos derechos de agua, pero en la Región de Coquimbo la demanda es bien amplia, hay muchos agricultores. Sería una de las zonas que está más complicada porque además no tienen reservas mayores, como glaciares y otras reservas de hielo».
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