Tres barcos con bandera de Guinea Ecuatorial, el Songhua, el Kunlun y el Yongding, que podrían estar ligados a la empresa española Vidal Armadores S.A., han sido acusados y perseguidos por Nueva Zelanda por capturar ilegalmente merluza negra en la Antártica. Tal como informamos hace 4 días.
La pesca de merluza negra y otras especies de estas aguas están gestionadas por la Comisión para la Conservación de los Recursos Marinos Vivos de la Antártida (CCAMLR). Por ello, Greenpeace demanda al Gobierno español que haga públicas las medidas tomadas para aclarar la propiedad de estos barcos y las sanciones que aplicará.
De acuerdo con las regulaciones de control y de Pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR), los Estados miembros de la Unión Europea (UE) tienen la obligación de asegurarse de que sus nacionales no se dedican a la actividad de la pesca ilegal y deben tomar medidas en caso de que lo hagan. Los Estados miembros con ciudadanos y/o empresas que puedan haber participado en actividades de pesca ilegal deben investigar y adoptar las sanciones correspondientes en caso de que se confirme la ilegalidad.
“Greenpeace ha denunciado en numerosas ocasiones la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada de Vidal Armadores y si se confirma que alguno de estos barcos pertenecen a esta empresa se demostraría que es necesario aumentar los esfuerzos en la lucha contra la pesca pirata”, ha declarado Celia Ojeda, responsable de Océanos de Greenpeace.
La empresa Vidal Armadores S.A., es conocida por haber aglutinado grandes cantidades de subsidios pesqueros de la UE. En 2011, Greenpeace denunció los grandes subsidios otorgados a esta empresa y la reincidencia en pesca ilegal de sus buques. Desde 1999 ha habido al menos 11 detenciones, 7 condenas, multas internacionales que suman más de 3 millones de euros y tres barcos confiscados. Sin embargo, a pesar de este historial, la Unión Europea y el Gobierno español han otorgado entre 2002 y 2009 cerca de 16 millones de euros en subvenciones a las empresas de la familia Vidal.
El Songhua, denominado anteriormente Paloma V, fue arrestado por pesca ilegal en 2008, y tenía una conexión clara con Vidal Armadores, reconocida por el Gobierno que inició unas investigaciones en 2009. El Yongding ha tenido once nombres y ocho banderas y el Kunlun quince nombres y ocho banderas desde que fueron incluidos en la lista negra de CCRVMA en 2004 y 2003, respectivamente. La lucha contra la pesca ilegal es una asignatura pendiente en la mayoría de los países. Una de las zonas más codiciadas por buques pesqueros se encuentra en las aguas próximas a la Antártida, donde se encuentra la merluza negra conocida como “oro blanco” por el precio tan elevado que alcanza en el mercado y que mueve todo un mercado negro paralelo.
“El Gobierno español modificó la Ley 3/2001 de Pesca Marítima del Estado, con el fin de reforzar la capacidad de las autoridades para la lucha contra la pesca ilegal. Greenpeace le pide al Gobierno que aplique estas medidas con carácter urgente”, ha añadido Ojeda.
Imagen: Greenpeace.