Provincia de Valparaíso, Región de Valparaíso. La exposición “120 escalones y un café, memoria y archivo de ex prisioneras de la región de Valparaíso” de Verónica Troncoso, inaugurada el pasado 7 de enero en el Parque Cultural de Valparaiso, contará con una serie de visitas especializadas a cargo de Alicia Olea, ex presa política cuyo testimonio es parte de la muestra.
Troncoso, investigadora y artista, señala que la importancia de realizar una visita guiada por una de las protagonistas de la muestra, radica en la proximidad del relato respecto de la prisión política. Esta cercanía con la experiencia de vida, conduce a los visitantes a una dimensión que explora la transmisión testimonial de una situación límite como es la reclusión política, la tortura, el exilio y la relegación, además de la visión de género sobre la represión en dictadura.
Alicia Olea en el momento de su detención era y es aún en la actualidad, militante del MIR. Cuando fue detenida tenía 24 años y hoy es parte de la muestra alojada en el PCdV. Olea además compartió con sus compañeras de prisión en la cárcel de mujeres Buen Pastor de Valparaíso.
Las visitas guiadas se realizarán los martes, miércoles y viernes, entre las 12:00 y 14:00 horas a partir del 10 de febrero, previa inscripción al correo [email protected]
La obra pone en montaje la investigación realizada por la artista Verónica Troncoso con la colaboración en la investigación de Valeska Navea y Consuelo Banda, sobre la prisión política de mujeres en la Región de Valparaíso.
A partir del levantamiento de información proveniente de archivos institucionales y principalmente de fuentes directas se ha generado una puesta visual del archivo preliminar sobre la prisión política de mujeres, abarcando éste principalmente la historia de nueve mujeres que compartieron prisión política en la Cárcel del Buen Pastor y que se siguen reuniendo hasta el día de hoy.
Ellas son: Alicia Olea, Cristina Fuentealba, Elisa Serey, Alicia Zúñiga, Milena Castro, Carmen Raffernau, Sylvia Lillo, Patricia Pulgar y Rosa Zúñiga.
La obra expone los archivos personales –fotografías, documentos y objetos– además de textos relacionados con los testimonios recabados, el archivo sonoro con las entrevistas completas realizadas a cada una de ellas y el retrato en el presente de cada una de ellas.
La intención de la obra es generar un archivo vivo a partir de la construcción libre y afectiva, y que en un devenir, en un trayecto y en el flujo, los espectadores puedan ir armando en base a vestigios y huellas esta historia que aún sigue abierta.
Finalmente acotar que el material que produjo esta investigación es de carácter inédito y no se encuentra depositado en ningún archivo institucional.