Representantes indígenas, aymaras y simpatizantes, marcharon por el centro de la ciudad de Arica, manifestando públicamente su desacuerdo con la declaración interpretativa, aprobada por la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado chileno.
“Rechazamos la declaración interpretativa y reservas y toda forma que trate de limitar y restringir el Convenio 169 de la OIT, aprobado en la Comisión de Relaciones exteriores del Senado, instrumento internacional que no puede ser mutilado en sus aspectos esenciales por el estado de Chile. Además no se ajusta a la doctrina y recomendaciones de los órganos de DDHH de la ONU”, sentenciaron mediante un comunicado público.
Explicaron que “este acto unilateral y arbitrario de la Comisión de Relaciones exteriores del Senado constituye la manera de vulnerar nuestros derechos como pueblo Aymara en esta región de Arica y Parinacota, al no considerar la palabra “pueblos” lo que volvería a reflejar la exclusión de nuestro derechos colectivos fundamentales, es una manera de intentar diluir y debilitar los derechos indígenas internacionalmente reconocidos”.
“La aprobación del Convenio 169 de la OIT, con reservas y declaraciones interpretativas, carecen de toda validez ante la organización Internacional del Trabajo, y por lo mismo deben ser desechadas desde la perspectiva de los derechos humanos. Constituye un acto ilegal e inconstitucional”, agregando que llaman a los Senadores y al Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet Jeria a que rectifiquen “su arbitraria e ilegal decisión y no someter a votación el instrumento de derechos humanos, como lo es el Convenio 169 de la OIT, ya que con la declaración interpretativas y reservas no será útil para los Pueblos Indígenas de este país. Si apostamos a la ratificación del convenio 169 de la OIT en forma integra y plena”.
Cabe destacar que el Convenio 169 de la OIT, ha sido ratificado por doce países en América Latina, sin generar fragmentación de los estados, contribuyendo a abordar conflictos estado-pueblos indígenas, asistiendo a su resolución en un marco de derecho y bajo de justicia.
Finalmente los participantes rechazaron la postura de algunos parlamentarios que se siguen resistiendo a la ratificación del Convenio 169 de la OIT, “primando en ellos posturas infundadas y temores atávicos -a la escisión, al separatismo, etc.-, levantando el fantasma de la violación de la soberanía y un pánico inusitado con los pueblos originarios, concepto que se niegan a aceptar e incluir en la Constitución”.
Leyla Noriega