El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ordenó cercar y militarizar con un total de 8.000 funcionarios de seguridad el departamento de Cabañas, en la zona central del país, como parte de su política de guerra contra pandillas que, según el mandatario, ha expulsado a los criminales a lugares donde se encuentran «fuera de su hábitat natural».
La orden fue anunciada por Bukele el lunes en la noche después de que identificaron que en esa región del país se esconden «varios grupos de pandilleros» que han huido de los «grandes centros urbanos» hacia las zonas rurales, debido a la persecución que ejercen las autoridades.
«Estas últimas semanas, hemos identificado varios grupos de pandilleros que se esconden en el departamento de Cabañas, por lo que decidimos cercarlo completamente. 8.000 hombres, entre policía y ejército, han acordonado más de 1.000 kilómetros cuadrados«, dijo Bukele, quien agregó que la labor de los funcionarios «será evitar la salida de pandilleros» de la demarcación y «cortar todas las líneas de suministro de los grupos terroristas».
Bukele afirmó que «ningún pandillero podrá salir» mientras los efectivos de la fuerza pública mantengan el cerco en el departamento de Cabañas, pues estos «equipos de extracción» se encargarán «de sacarlos de sus escondites». Además, detalló que la fuerza pública que opera en el sitio está integrada por 7.000 soldados y 1.000 policías.
«Este masivo cerco garantiza aún más la seguridad de la zona y no lo levantaremos hasta dar con todos los delincuentes (…) La población honrada, visitantes y turistas no tienen nada que temer. La seguridad está garantizada», expresó el mandatario a través de la red social Twitter (ahora llamada X), donde también mostró fotos y un video del despliegue de seguridad.
Capturas y operativos en Cabañas
La Policía Nacional Civil (PNC) de El Salvador informó este martes sobre la captura de los primeros «dos peligrosos terroristas» en Cabañas. Según la institución, los detenidos son integrantes de la pandilla 18S y fueron encontrados por las Fuerzas Especiales en la localidad de Ilobasco, reseña RT.
Los hombres fueron identificados como Wilber Salvador Flores Flores, alias ‘Cruizito’, que presuntamente era gatillero de la pandilla y fue hallado escondido en una fosa séptica junto a José Antonio Flores Hernández, ‘Parca’.
«Ambos serán procesados por agrupaciones ilícitas y pasarán décadas en la cárcel por otros delitos que aún quedan pendientes que pagar», aseguró la PNC.
El director y comisionado general de la Policía Nacional Civil de El Salvador, Mauricio Arriaza Chicas, comentó que los operativos que despliegan en Cabañas contra los miembros de las pandillas, incluyen la revisión de todas las zonas rurales, boscosas y de montaña.
«Los vamos a sacar de esos lugares y la única finalidad es proteger la vida y los bienes de todas las familias salvadoreñas y, en especial, de la población del departamento de Cabañas», dijo Arriaza Chicas.
Además, la PNC detalló que revisan todos los vehículos que entran y salen de Cabañas, así como a las personas que consideran «sospechosas», para prevenir «el traslado de terroristas» y garantizar «la seguridad de los salvadoreños que se desplazan hacia el departamento».
Críticas a la política de Bukele
A inicios de julio pasado, se incrementaron las denuncias contra las políticas de seguridad de Bukele, al punto que se conocieron varios casos de ciudadanos colombianos que habrían sido detenidos en El Salvador, presuntamente acusados de pertenecer a bandas criminales, en medio del régimen de excepción impuesto por el Gobierno salvadoreño desde marzo de 2022 para combatir a las pandillas.
Ante la situación, familiares de los colombianos detenidos realizaron protestas a las afueras de la embajada de El Salvador en Bogotá, con la intención de entregar un documento a la misión diplomática para reclamar la libertad de los suyos y saber sobre su condición.
La Organización Socorro Jurídico Humanitario (SJH), que se ha dedicado a denunciar las presuntas irregularidades de la fuerza pública salvadoreña bajo el régimen de excepción, expresó su solidaridad con las familias de los capturados colombianos.
Según la prensa local, serían al menos 35 colombianos los que se encuentran encarcelados «arbitrariamente» por las autoridades salvadoreñas, sin que se les haya realizado un juicio o demostrado su culpabilidad.
Algunos casos
Las detenciones de los ciudadanos colombianos –según la versión que manejan sus familiares– se habrían producido porque son jóvenes, tienen tatuajes en su cuerpo, trabajan en la calle o residen en zonas populares de escasos recursos.
El medio Colombia Informa resaltó el caso de José Potes, quien según su familia admiraba a Bukele y decidió ir a ese país en busca de oportunidades. Sin embargo, la historia cambió cuando terminó capturado por las autoridades de El Salvador por tener tatuajes.
Otro caso parecido es el de Saín Sameth Ferrer García, de 24 años de edad. Su madre, Amarilis García, dijo a RCN Radio que el joven viajó a El Salvador a inicios de 2023 en busca de oportunidades, pero resultó detenido cuando vendía mercancías en la calle.
«Que nos digan dónde están»
Durante el plantón que realizaron frente a la embajada salvadoreña, las familias llevaron carteles con rostros de algunos de los detenidos, solicitaron justicia y gritaron su principal interrogante: «¿dónde están?».
«Queremos una respuesta, queremos que nos digan dónde están y por qué están donde los pusieron«, dijo la mujer reseñada por La Prensa Gráfica. Los familiares también enviaron una carta al presidente de Colombia, Gustavo Petro, para solicitar ayuda frente a la coyuntura.
Los parientes advirtieron que se mantendrían en protesta y continuarían con los plantones frente a la embajada salvadoreña hasta que consigan respuestas y justicia.
Saldo del régimen de excepción de Bukele
El régimen de excepción se mantiene en El Salvador. El pasado martes, la Asamblea Legislativa aprobó la décima sexta prórroga de esta medida.
«El régimen de excepción va a terminar cuando capturemos al último terrorista en territorio salvadoreño, que les quede claro», dijo el ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Villatoro, al solicitar la nueva prórroga al Parlamento.
Agregó que todas las encuestas de opinión, incluso las de la oposición y las internacionales, «reflejan un amplio respaldo en más del 90 % de la población, en un año y cuatro meses de régimen de excepción».
El Gobierno de Bukele ha resaltado que durante la política de mano dura contra las pandillas los resultados han sido palpables. Según el ministro de Defensa Nacional, Francis Merino Monroy, desde marzo de 2022 han sido capturados 71.479 delincuentes, se han incautado 3.001 armas de fuego, 4.690 vehículos y 17.359 teléfonos celulares.
Además, se contabilizan 294 días con cero homicidios desde el inicio del régimen de excepción y, en lo que va de 2023, se registran 132 días sin muertes violentas.
«Tenemos una proyección de finalizar el año con una tasa de 1,9 o 2,5 homicidios por cada 100.000 habitantes. Estamos convencidos de que el régimen debe continuar hasta sacar de las calles al último pandillero», mencionó Monroy, quien también estuvo presente en la solicitud de la prórroga de la medida ante el Congreso.
Villatoro enfatizó que «los más de 6,3 millones de salvadoreños están viviendo mejor», porque han logrado recuperar «la esperanza, la libertad de poder moverse a lo largo y ancho» del país.
«Aún falta más, sepan que el presidente y el Gabinete de Seguridad vamos a seguir de la mano respondiendo a las necesidades de los salvadoreños», prometió el ministro.
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