Al igual que el primer puente, el segundo que conectará a Costanera Center con el túnel del San Cristóbal será pagado por los contribuyentes. Costará 3 millones de dólares y organizaciones ciudadanas denuncian la inocencia del Ministerio de Obras Públicas.
El Ministerio de Obras Públicas asumirá el costo íntegro del segundo puente sobre el río Mapocho que conectará las calles El Cerro con la futura Av. Nueva Tobalaba, que colinda con el proyecto Costanera Center. El puente costará 3 millones de dólares, según anunció el ministro Sergio Bitar.
Así lo denunció la Fundación Defendamos la Ciudad y Junta de Vecinos Nº 11, La Costanera, de Providencia.
Dicha extensión de calle es producto del proyectado Costanera Center, cuya construcción, pese a que se redujera el proyecto original, aumentará el flujo vehicular en el sector. Así lo señaló el Estudio de Impacto Sobre el Transporte Urbano (EISTU) aprobado por el Seremi de Transportes.
El puente ya habilitado que conecta con el túnel del San Cristóbal fue construido por el MOP, es decir, pagado por todos los contribuyentes.
Patricio Herman, de Defendamos la Ciudad recordó que “Costanera Center ya había decidido no asumir el costo de la construcción de este segundo puente, proponiéndole al MOP que, por esa obra, como por la del túnel de la Av. Andrés Bello, compartieran sus costos por partes iguales y como el MOP no había aceptado esa proposición, el titular del megaproyecto decidió paralizarlo y así confrontar posturas con el debilitado Estado chileno”.
También Herman acusa cierta inocencia funcionaria de parte de Bitar, ya que éste manifestó que concesiones del MOP está llevando el tema adelante y que su ministerio le exigirá una compensación a Cencosud mediante una obra equivalente.
Herman señala que esto “es impracticable pues la Unidad de Concesiones del MOP no tiene nada que ver con obras viales no concesionadas como la que comentamos. En resumen, con recursos financieros de la nación se construirá el puente y visualizamos que Cencosud, con el paso del tiempo, y aplicando la atávica práctica de los hechos consumados, no hará ninguna obra compensatoria como lo desea Bitar”.
Por su parte, Marcelo Böhm, presidente de la Junta de Vecinos Nº 11, en donde se localiza el proyecto inmobiliario paralizado, expresó que “no sólo el proyecto Costanera Center se tramitó en absoluto secreto y por lo tanto la comunidad no fue consultada, sino que ahora la administración pública cae rendida a los pies de Cencosud y toma la decisión de hacer lo que debió hacer el empresario Paulmann. Estos laxos comportamientos del Ejecutivo le hacen mal al sistema de libre mercado porque así se entregan contradictorias señales a los actores que se desenvuelven en los grandes negocios. Estamos seguros que con un constructor pyme el MOP hubiera sido muy enérgico y exigente”.
El Ciudadano
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