Desde el primer año de relación, Laura recibió ataques verbales, físicos y psicológicos de su expareja. Al inicio, normalizó la violencia hasta que una de las agresiones puso en riesgo la integridad de sus hijos.
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La pesadilla empezó en 2021, cuando su entonces marido decidió salir de su domicilio para que ella “aprendiera a valorarlo”.
Eduardo (nombre ficticio) emprendió un viaje fuera del país con sus dos hijos, una de ellas una niña de 12 años, a quienes abandonó por una noche de copas y mujeres.
En Puebla, 600 mujeres denuncian mensualmente un caso de violencia familiar, principalmente por agresiones físicas, reportan datos oficiales de la Fiscalía General del Estado (FGE).
Laura, quien pidió así llamarse por temor a las represalias, quiere recuperar su vida y tranquilidad, luego de sufrir violencia durante 13 años por parte de su expareja, a quien ha denunciado en varias ocasiones.
“Me robó mi tranquilidad y la paz, no puedo salir a la calle tranquila (…) él ya cumplió con todas las promesas, desde despojarme del negocio hasta hacerme la vida imposible, lo único que le falta es desaparecerme”
En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que se conmemora anualmente el 25 de noviembre, Laura comparte su historia con El Ciudadano México y hace un llamado a las mujeres a levantar la voz para denunciar.
Poner un alto a la violencia
Laura llegó a Puebla hace 11 años por motivos laborales, junto con Eduardo (nombre ficticio) con quien vivía en concubinato. Con él tuvo dos hijos, ahora tienen 12 y 2 años, respectivamente.
El año pasado, su exmarido decidió “torturarla con su ausencia” y salió del país con sus hijos, a quienes abandonó por 24 horas.
Eduardo fue encontrado “borracho” y “drogado”, para después admitir que había tenido un encuentro íntimo con varias mujeres para “pasarla bien”.
“Yo ya no estaba dispuesta a aceptar otra falta de respeto y ahí empezó el infierno para mí, porque comenzó a subir más la violencia”
Laura hizo oficial su separación y se recrudecieron las agresiones no sólo contra ella, sino contra sus hijos.
Intentó sustraer a su bebé
Uno de los hechos más graves, recordó la madre, fue cuando Eduardo la amenazó con quitarle a su bebé a cambio de que ella firmara documentos, con los cuales le cedería su parte de un despacho que habían construido juntos.
Por este motivo, aunado a los casos violencia familiar, ella decidió denunciarlo, el pasado 5 de septiembre, además por los delitos de acoso y por robo de vehículo.
Sobre este último caso, explicó que él aprovechó las visitas y convivencias que tenía con sus hijos para entrar a su casa, forzar un cajón, sacar los papeles y el duplicado de las llaves del auto para llevárselo.
En aquella ocasión, Laura acusó que él se robó 70 mil pesos y le “sembró droga”, para luego grabar un video sobre los supuestos hechos y compartirlo con las personas más cercanas a ella, como una posible prueba para pelear la custodia de sus hijos.
A pesar de las denuncias, el acoso y las amenazas continúan. Laura también denunció a su expareja de hostigar a sus seres queridos como su mamá y un amigo con la que él la vincula sentimentalmente.
“El 15 de septiembre, el señor entró a mi domicilio, se robó mi ropa interior y ropa normal, como blusas, pantalones y una sudadera deportiva, días después le mandó fotos a la persona con la que me vincula personalmente, y le dice: mira dile a esta puta que esta sudadera regresó a su lugar de origen”
“Baja la cabeza y pídeme perdón de rodillas”
Laura también señaló que ha sido víctima de violencia económica, ya que Eduardo constantemente retrasa el pago de la pensión de sus hijos y busca “humillarla” para que “le regrese sus privilegios”.
“Él me lo ha dicho: ven, pídeme perdón de rodillas, bajas la cabeza y tus privilegios van a seguir, pero yo le contesto: ¿privilegios?, son tus obligaciones; a mis hijos textual les dice: ustedes sólo me buscan por dinero”
Insuficiente, el apoyo de las autoridades
Tras las denuncias emitidas, Laura y sus hijos han logrado obtener medidas de protección por parte de la Fiscalía General del Estado, motivo por el cual su agresor, a quien ha calificado como un “potencial feminicida”, no puede acercarse a ella ni a sus hijos en un radio de 50 metros, situación que Eduardo no ha respetado.
De parte de la Secretaría de Igualdad Sustantiva (SIS) y la Unidad de Atención Inmediata, del gobierno estatal, ella y sus hijos también reciben acompañamiento, vigilancia y terapias psicológicas.
A pesar de esto, considera que el apoyo institucional es insuficiente, ya que Eduardo continúa con las amenazas y violencia, toda vez que “presume de tener influencias”.
La única manera de escapar de él, afirmó, es irse del estado y del país, una vez que logre tener de manera permanente la guarda y custodia de sus hijos; asimismo, confía que pronto sea judicializado el caso para que Eduardo sea detenido.
De esta manera, exigió que se haga justicia y que los mecanismos en Puebla para tratar este tipo de casos mejoren.
“Es muy triste y muy injusto, que yo tenga que dejar todo atrás, por no contar con el suficiente apoyo de las autoridades (…), lo que quiero hacer es que una vez que se me otorgue la guarda y custodia de mis menores, es irme del país, porque no me va a dejar en paz”
Las mujeres no deben tener miedo
Laura aprovechó el momento para hacer un llamado a todas las mujeres víctimas de violencia a no tener miedo y denunciar a su agresor, al tiempo de ser persistentes pese a los obstáculos que puedan presentarse.
“Las personas no cambian, una vez que caen en una situación así, vuelven a caer, esa persona que tuve nunca iba a cambiar (…) que no tengan miedo, yo al principio le tenía muchísimo miedo a mi agresor, casi quería vomitar cuando sabía que lo tenía que ver, pero ahora ya no le temo”
En Puebla, 7 mil mujeres denuncian amenazas y violencia familiar
De acuerdo con una solicitud de información de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla, de enero a septiembre de 2022, se han registrado 7 mil 517 denuncias por delitos de violencia familiar y amenazas contra mujeres.
En el caso de la violencia familiar, se reportaron 5 mil 434 casos en este periodo, de los cuales 5 mil 17 ocurrieron contra mayores de edad y 417 en contra de menores de 18 años.
En el estado este delito afecta a un total de 151 de 217 municipios poblanos; Puebla capital tiene la mayor incidencia con mil 860 casos.
Le siguen municipios como Tehuacán, con 358; Atlixco, 185; San Andrés Cholula, con 168; Amozoc, con 151; Huauchinango, con 131; San Martín Texmelucan, 133; y Cuautlancingo, con 130.
Para los delitos de amenazas, la entidad poblana sumó 2 mil 83 casos; en donde 2 mil 60 fueron para mujeres mayores de edad y únicamente en 23 hechos las víctimas fueron menores.
En este caso, las demarcaciones con la mayor incidencia fueron Puebla capital con 670 casos; Tehuacán, con 132; Atlixco, 74; Cuautlancingo, 64; así como Amozoc y San Pedro Cholula, con 63.
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Portada: Iván Rojas
Videos: Armando Aguilar
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