“Chile arqueológico: Diez hallazgos fundamentales para comprender nuestro pasado” es la nueva propuesta de Rodrigo Riveros Strange, arqueólogo, autor e ilustrador, que usando el cómic y buenas dosis de humor, se adentra en las historias de la arqueología chilena.
El libro, fruto de dos años de investigación, recoge hallazgos de casi todo el país. Comienza revisando la espectacularidad de Monte Verde (Puerto Montt) y de cómo este sitio cambió para siempre lo que se sabía sobre el proceso de poblamiento del continente americano. Continúa con la sociedad Chinchorro, sus momias, su cultura, relación con el mar y sus recursos. Se detiene en el Alero de San Pedro de Pichasca, en la IV Región, y en cómo esta caprichosa formación rocosa permitió el desarrollo de comunidades de cazadores recolectores 9.000 años atrás. Sigue con los hallazgos de Tulán 54, que nos muestra cómo se organizaron las primeras aldeas complejas al interior de la región de Antofagasta. Explora los hallazgos realizados, en lo que hoy es el edificio corporativo del Diario El Mercurio, un espectacular cementerio con 36 tumbas de que arrojaron interesantes datos de lo que hoy se conoce como la cultura Llolleo (habitaron las regiones metropolitana, quinta y sexta entre los años 900 a 250 años antes de Cristo).
El imperio de Tiawanaku y su diplomática forma de relacionarse con las comunidades de San Pedro de Atacama pudo ser conocida a través de los restos encontrados en el Cementerio de Solcor 3. Muchos años después los Inkas, dominaron también el territorio nacional hasta la zona central ¿Cómo es posible rastrear su presencia?, sus vestigios se extienden a largo del paisaje nacional, en donde encontramos pucarás, caminos y arte rupestre, son parte de lo que el libro nos relata a través de divertidas historietas, que logran amalgamar humor y ciencia en un lenguaje que permite que la lectura sea adecuada para niños desde 10 a 99 años de edad.
Pero los hallazgos no sólo son precolombinos, ni en tierra firme. El autor introduce la no muy difundida tarea que realiza la arqueología subacuática en Chile. Una disciplina que le quita la pala y la brocha al arqueólogo para ponerle un traje y tanque de buceo, que le permite llegar a las profundidades del mar en donde yacen los restos de numerosas embarcaciones que abundan en nuestras costas.
Rodrigo Riveros, el autor, comenta que el cómic “permite humanizar el relato, darle rostro a nuestros antepasados, recrear sus relaciones sociales y espaciales con el entorno. No estamos hablando sólo de restos materiales o de osamentas, sino de seres humanos que han dejado objetos usados en su vida diaria”.
El arqueólogo considera que el libro además de dar a conocer información de los antiguos habitantes de nuestro país, en un lenguaje divertido y fácil de comprender, quiero dar cuenta del trabajo práctico de la arqueología.
Este trabajo contó con el apoyo del Colegio de Arqueólogos de Chile, el Departamento de Antropología de la Universidad de Chile, el Consejo de Monumentos Nacionales y la Sociedad chilena de Arqueología. Su publicación fue posible gracias al financiamiento del Fondo Nacional de Fomento del Libro y la Lectura, del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. Se puede adquirir en la Galería Plop, Librerías Qué Leo, Librería Lea+ del GAM, Librerías Metales Pesados, para compras online en www.dinova.cl. El libro tiene un valor de 4.000 pesos.
El Ciudadano
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