Un nuevo brote de coronavirus en China ha matado al menos a 17 personas y contagiado a más de 600, de las cuales 95 se encuentran en estado crítico. La epidemia traspasó las fronteras del país asiático, por lo que científicos estudian hasta dónde será su avance.
El nuevo coronavirus, conocido como «neumonía de Wuhan» o 2019-nCoV, se detectó por primera vez en diciembre pasado, en la ciudad centrooriental de Wuhan, capital de la provincia de Hubei.
Según algunas investigaciones, el origen del brote se encuentra en un mercado de mariscos de esta ciudad que no tiene costa y en la que en la que habitan alrededor de 11 millones de personas.
Otros investigadores apuntan a orígenes distintos. Según un estudio publicado el pasado 21 de enero en la revista Science China Life Sciences, en el que analizaron las relaciones entre la nueva cepa y otros virus, se concluyó que está estrechamente relacionado con una cepa existente en murciélagos.
«El hecho de que los murciélagos sean los huéspedes nativos del Wuhan CoV sería el razonamiento lógico y conveniente, aunque es probable que haya huéspedes intermedios en la cascada de transmisión de murciélagos a humanos«, subrayaron los expertos que realizaron el estudio.
Un segundo informe, publicado el 22 de enero en la revista Journal of Medical Virology, planteó que las serpientes serían responsables de la transmisión a humanos.
En especial dos especies, el krait con muchas bandas y la cobra china, que estaban entre los animales que más se vendían en el mercado de mariscos de Wuhan antes de ser clausurado por las autoridades, reseñó Actualidad RT.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) sostiene que «lo más probable es que una especie animal sea la fuente primaria de este nuevo brote de coronavirus», por lo que recomienda que se tomen medidas de protección para el contacto con animales y se cocinen convenientemente todos los alimentos de origen animal.
Cuarentena en Wuhan
Las autoridades chinas confirmaeon que la transmisión no solo se da por contacto con animales, sino que también se contagia entre personas. Por tal motivo, decidieron ordenar una cuarenta y suspender el “transporte público urbano, el metro, el ferri y los transportes de pasajeros de larga distancia” en Wuhan.
El aeropuerto y la estación de tren también están “temporalmente cerrados” y está prohibido a todos los ciudadanos salir de Wuhan, así como también se ordenó a todos los habitantes llevar mascarilla en lugares públicos.
Adicionalmente, esta medida se amplió a las ciudades de Huanggang y Ezhou. La primera está ubicada a 60 kilómetros de Wuhan, mientras que la segunda solo la separa un puente.
En Wuhan, también se designó a una serie de hospitales y clínicas que tratarán específicamente a los pacientes con los síntomas descritos.
Estas drásticas acciones tienen como objetivo, según un comunicado, “cortar de forma efectiva la transmisión del virus“.
Asimismo, el Consejo de Estado también decidió que, en vísperas del Año Nuevo Chino, en el que decenas de millones de personas vuelven a sus lugares de origen, los pasajeros sean sometidos a un control de temperatura en los aeropuertos, puertos, estaciones de autobuses y de tren.
El presidente de la nación asiática, Xi Jinping, decretó «máxima prioridad» a la erradicación de la enfermedad que, según la agencia estatal de noticias Xinhua, se ha convertido en «una emergencia de salud pública».
¿Cuáles son los síntomas?
Los coronavirus como el 2019-nCoV reciben su nombre debido a los picos que sobresalen de sus membranas, que se asemejan a la corona del sol. Pueden infectar tanto a animales como a humanos y causar enfermedades del tracto respiratorio, que van desde el resfriado común hasta afecciones graves.
Los síntomas descritos para la neumonía de Wuhan son fiebre y fatiga, acompañados de tos seca y, en muchos casos, disnea (dificultad para respirar).
Los casos más leves pueden parecerse a la gripe o un resfriado, lo que hace más difícil la detección. Se cree que el periodo de incubación —desde la exposición al virus hasta la aparición de síntomas— es de alrededor de dos semanas.
¿Qué tan mortal es el coronavirus?
Según los datos iniciales, su índice de mortalidad es del 1,5 %, pero los científicos realizan un seguimiento diario para ver cómo evolucionan los pacientes.
Por ahora, el 2019-nCoV se puede considerar menos agresivo en sus consecuencias, comparado con el síndrome respiratorio agudo y grave (SARS), y el síndrome respiratorio de oriente medio (MERS).
La epidemia de SARS, con el último caso reportado hace más de 15 años, provocó la muerte de 800 personas y ha infectado a unas 8.000 con una tasa de mortalidad en torno al 10 %.
El MERS, todavía activo pero geográficamente contenido en la península Arábiga, ha infectado a cerca de 2.500 personas con más de 850 casos fatales y registra una tasa de mortalidad de 35 %.
No obstante, el nuevo coronavirus de Wuhan es muy parecido al SARS, ya que sus genomas tienen una homología superior al 80 %.
Más de 600 infectados
La cantidad de infecciones en humanos ha crecido dramáticamente en China, que tiene 13 provincias afectadas, con más de 600 personas contagiadas.
Hasta el momento, la mayoría de las víctimas mortales han sido adultos mayores con condiciones de salud preexistentes, como diabetes y cirrosis. Salvo uno solo, todos residían en la central provincia de Hubei.
Por su parte, el mayor porcentaje de los infectados se encontraban o habían visitado recientemente la provincia china, cuya capital es Wuhan.
Esta ciudad es una las 10 mayores economías, la séptima ciudad más grande del gigante asiático y un punto nexo clave para el transporte comercial. Su aeropuerto recibió a 20 millones de pasajeros en 2018 y conecta con todas las regiones del mundo, ya que ofrece vuelos directos a Londres, París, Dubái o Nueva York, entre otros destinos.
Las características de Wuhan hicieron posible que el coronavirus se propagara tan rápido y ahora existan casos confirmados en Taiwán, Japón, Tailandia, Corea del Sur, Singapur, Vietnam, Arabia Saudí, Estados Unidos y Australia. Mientras que en Escocia, Italia, México y Canadá evalúan a pacientes.
Por tal motivo, aeropuertos de todo el mundo, entre ellos algunos en Estados Unidos, Tailandia y Australia, están revisando a los pasajeros que llegan procedentes de China, realzando una rápida medición de la temperatura corporal en búsqueda de una posible fiebre.
¿Hasta dónde llegará la neumonía de Wuhan?
Especialistas médicos de renombre que participan en el Foro de Davos advirtieron que la cuarentena impuesta a la ciudad de Wuhan no detendrá la transmisión del nuevo coronarivus.
“Varias ciudades han reportado casos y se pueden esperar muchos más”, declaró el científico Jeremy Farrar, quien entre otras responsabilidades dirigió por dos décadas la Unidad de Investigación Clínica de la Universidad de Oxford en Vietnam, por lo que conoce la epidemiología de la región.
No obstante, indicó que se sospecha que su tasa de mortalidad será menor a la del SARS, que llegó a ser del 10 %.
Por su parte, el médico y director de la Coalición para la Preparación ante Pandemias e Innovaciones, Richard Hattchett, manifestó que ahora “lo que no sabemos sobre el coronavirus es más de lo que sabemos”, y que “la dinámica del contagio” y su gravedad son las mayores incógnitas.
Mientras, la OMS optó por no declarar, por los momentos, una emergencia internacional ante el nuevo coronavirus.
Tras dos días de reuniones en la sede de la OMS en Ginebra, un comité de emergencia formado por expertos médicos de diversos países y convocado por el director general de la organización, Tedros Adhanom Ghebreyesus, descartó por ahora la posible alerta al ser «demasiado pronto», tal y como señaló el presidente del comité Didier Hussin.
Sin embargo, Tedros Adhanom Ghebreyesus enfatizó que el coronavirus sí es una «emergencia en China» y que podría convertirse en una de carácter internacional.
La OMS define una emergencia de salud pública internacional como «un evento extraordinario que representa un riesgo a la salud pública de otros Estados a causa de la propagación internacional de una enfermedad», como ocurrió con la expansión del virus del Zika, la gripe H1N1 y el ébola.
Por tal motivo, la organización tiene la posibilidad de volver a convocar el comité en el futuro con el fin de debatir nuevamente una eventual emergencia internacional, que supondría la puesta en marcha de medidas preventivas a nivel global.
Para evitar la propagación del brote la OMS recomienda el uso de mascarillas y pañuelos para cubrirse la nariz y la boca cuando se tose o se estornuda, evitar el contacto con animales o usar protección para ello, lavarse las manos de manera frecuente, evitar mercados y aglomeraciones, y -por supuesto- no visitar la ciudad china de Wuhan.
Otra de las medidas es acudir al médico tan pronto como se identifiquen los síntomas.