1. Música para motivarte
2. Sonríe (aunque no te apetezca)
3. Haz feliz a alguien
Ten un detalle con alguna amiga, ayuda a alguien que lo necesite, haz un pastel para llevar a tu trabajo por sorpresa… Hacer algo bueno por los demás te aporta una sensación de bienestar que seguro te pone de buen humor durante todo el día. Y es que regalar sonrisas y ayudar a los demás es de lo más reconfortante. Si haces felices a los demás, los demás se esforzarán por hacerte feliz. Y tampoco olvides de decirle «te quiero» a tu familia o a tu pareja… ¡No hay nada tan placentero!
4. Cíñete a la lista
Elabora una lista de tareas pendientes y vete tachándolas a medida que avances. Parece una tontería, pero hay pocos placeres tan reconfortantes como ir tachando lo que has hecho durante la jornada y ver lo mucho que te ha cundido el lunes. Si haces del lunes un día productivo, ¡sentirás que ha merecido la pena vivirlo!
5. No te saltes el desayuno
Es necesario hacer hincapié en la importancia de hacer cinco comidas al día y beber agua en abundancia. En cuanto a lo de las comidas, lo habrás oído mil veces, pero es necesario grabárselo a fuego: ¡el desayuno es la comida más importante del día! Trabajar con la sensación de un vacío en el estómago no es nada productivo, y sobre todo sentirás que te falta energía. Así que móntate un gran desayuno en casa: zumo natural, yogur, cereales, café, tostadas…
6. Llega descansada al trabajo
El fin de semana es para descansar. Aprovecha para desconectar de todo, incluido el trabajo. Quédate en casa disfrutando de tu vida en familia o de tu serie favorita, sal a un concierto, queda con tus amigos, ve una peli o duerme siestas infinitas… Elige lo que más vaya contigo, de manera que llegues al lunes con la satisfacción de haber aprovechado al máximo tus días de descanso.
El domingo no trasnoches demasiado, acuéstate a una hora prudente y duerme bien para enfrentarte al lunes llena de energía y con un humor inmejorable.
7. Come sano
La comida basura puede estar deliciosa durante los 10 minutos que la comes, pero luego puede que sientas pesadez o remordimientos y a la larga no le estás haciendo ningún favor a tu cuerpo. Por ello, lo mejor es que aproveches los lunes para hacerte una comida nutritiva y saludable donde haya fruta, verdura y pocas salsas. Esto te servirá para eliminar los excesos del fin de semana y te hará sentir mejor contigo misma. ¡Haz la prueba!
8. El día no acaba al salir del trabajo
Puedes reservarte la tarde del lunes para hacer planes divertidos a la salida del trabajo. Puede ser una noche de chicas saliendo a cenar con ellas, o puedes ir a una obra de teatro, reservar entradas para una exposición… ¡No tienes por qué hacer cosas divertidas solo los fines de semana! Así que haz algún plan infalible que te haga estar deseando que llegue el lunes para divertirte. Y si no tienes plan fuera de casa, ¿por qué no reservas los lunes para ver algún capítulo nuevo de tu serie favorita o te haces una sesión de cine?
Por otro lado, también puedes animarte a practicar ejercicio. El deporte no solo activa tu cuerpo y mente, también te hace sentir bien contigo misma. Al principio, cuando no tienes costumbre, cuesta mucho y da pereza. Pero haciendo deporte serás más fuerte, dormirás mejor y y te verás bien delante del espejo, entre otros muchos beneficios. Tienes multitud de actividades donde escoger: running, bici, gimnasio, natación, artes marciales, yoga… ¡Elige la que más te guste y no abandones!
9. ¡Sal de la oficina!
Debes buscar la forma de liberar tu estado de ánimo y tu productividad dándole un respiro a tu cerebro. Una llamada rápida fuera de la oficina o ir a dar un paseo después de la comida, hará que liberes tu mente. Así el día pasa más rápido y sentirás que has hecho algo más que mirar la pantalla del ordenador. ¡Se acabaron los ojos secos!
10. Baño de burbujas y muchos mimos
Los baños de burbujas son muy estimulantes y provocan el buen humor. Tómate tu tiempo para recuperar energía, descansar, desestresarte, reflexionar, aclarar tu mente… No podemos pensar en un plan mejor para que el lunes sea más llevadero. Puedes hacerlo el domingo por la noche para empezar bien la semana o el lunes al volver del trabajo. Además, te ayudará a conciliar el sueño más fácilmente. Compleméntalo con una buena sesión de cuidados para ti: cremas, exfoliación, mascarillas capilares… Si te mimas, verás frente al espejo la mejor y más relajada versión de ti misma y eso aumentará tu autoestima: ¡perfecto para dar color a un lunes!