Autocultivo en Argentina: ¿Mamá, puedo tener mi planta?

El autocultivo de marihuana es un reclamo que lleva décadas por parte de distintos sectores de la sociedad, apelando certeramente que es más saludable y evita el narcotráfico. ¿Qué pasa cuando los adolescentes quieren tener esta práctica y tienen que charlarlo con sus padres? Enterate en la siguiente nota.

Noelia Pirsic, de Anccom, realizó una serie de entrevistas a familias que aceptaron que sus hijos tengan su propia planta de marihuana en el hogar familair. Lucía, madre de 38 años, por ejemplo, le propuso a su hijo adolescente que cosechara sus propias flores antes que fumar material procesado de dudosa calidad. “Es increíble, quizás se olvida de darle la comida al perro pero a la planta la tiene resplandeciente”, sostiene.

Sofía, otra madre entrevistada, expresa que “al principio me resultaba un poco raro pero ahora ya me acostumbré, prefiero que consuma lo que ella misma cosecha. Si no, igual va a consumir afuera, y entiendo que hay gente que vende cosas de muy mala calidad. Nosotros sabemos que plante o no plante, va a fumar igual”. Ahora bien, tanto Sofía y Lucía son madres relativamente jóvenes. ¿Qué sucede cuándo son madres de otras generaciones?

Marta, de 70 años, aseguró: “La primera vez que supe que mi hija fumaba marihuana fue como un golpe acá”, repite más de una vez mientras se señala la boca del estómago”. Con el paso del tiempo, asegura, se fue acostumbrando a esta nueva realidad.

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