Cáncer de mamas: la importancia de las campañas preventivas

En el mundo, aproximadamente 1.500 mujeres mueren diariamente debido al cáncer de mama que las afecta. De ellas, tres son chilenas. Sin embargo, cada día existen mejores métodos de prevención. ¿Cuál es el tuyo?

Octubre ha sido declarado el mes del cáncer de mama. Diversas entidades se han unido a la campaña por la prevención de esta enfermedad que representa el 10% del total de los males oncológicos.

La principal preocupación radica en que una de cada diez mujeres es propensa a contraer este cáncer y los factores que contribuyen con él son variados: herencia familiar, modificaciones celulares, condiciones de vida, alimentación, actividad física, etcétera.

Es por eso que la unión por campañas de prevención incentiva a las mujeres para que se preocupen por su salud y tomen conciencia a tiempo de este enemigo poderoso que amenaza no sólo a algunas, sino a todas las mujeres del mundo.

Al referirse a estas campañas, la sicóloga María Cristina Yasigi expresa que “son muy buenas, pues influyen y son creadoras de conciencia – sobre todo en las personas sobre los 30 años – al jugar con el factor ‘a mi también me puede tocar’. La identificación es lo más importante para que la población se cuide”.

Mujeres a tiempo de prevenir

Varios expertos, uniéndose a esta lucha mundial, han hecho una serie de recomendaciones para detectar a tiempo esta enfermedad, pero también han otorgado varios tips para prevenirla.

El autoexamen, que consiste en la palpación de las zonas mamarias, sigue siendo uno de los mecanismos más utilizados para detectar el cáncer. Sin embargo, en diversas ocasiones, este ejercicio no es del todo efectivo, pues detecta los tumores cuando ya están avanzados.

Es por eso que se recomienda realizar, al menos una vez al año, una mamografía y, en los casos en que sea necesario, cada seis meses. Pero también coexisten otras maneras de prevención que, en conjunto con el examen de rigor, pueden ayudar a alejar esta enfermedad. Algunos estudios de la Universidad de Washington y también de la Universidad de Melbourne, indican que hacer deporte y mantener un buen estado físico, puede reducir en un 25% las posibilidades de contraer la enfermedad.

Al mismo tiempo, llevar una sana alimentación también puede ayudar, puesto que la enfermedad es más frecuente en las mujeres que padecen obesidad. A pesar de todo, algunas personas optan por alternativas más drásticas, como remover sus pechos, cuando saben que tienen antecedentes oncológicos considerables.

por Flavia Achermann y Valeria Villalobos