Luego del cierre de la Clínica Dental Vergara, en el edificio Escorial de Viña del Mar, por malas prácticas y ejercicio ilegal de la profesión, Acuña afirmó que “desde el año 2007, hemos venido planteando a las autoridades que el intrusismo, la existencia de falsos dentistas, es uno de los problemas más graves para nuestros pacientes y para la odontología. Como consecuencia de este trabajo, un grupo de diputados presentó un proyecto de ley que pretende endurecer las penas en contra de estos falsos profesionales de la Odontología. Sin embargo, hoy el proyecto duerme y hemos pedido que se reponga”.
El presidente del Colegio de Dentistas afirmó que “actualmente, la tipificación del delito de intrusismo hace que, en la práctica, los falsos dentistas no vayan a la cárcel. Esto es aberrante porque, en muchos casos, las penas remitidas les permiten cambiarse de barrio y seguir delinquiendo”.
“Para corregir este problema –afirmó Acuña- es fundamental usar la herramienta penal: que quienes trabajen como dentistas sin tener su título universitario, tengan penas de presidio entre los 3 años y 1 día y los 5 años, sin derecho a libertad, como lo plantea el proyecto de ley que actualmente está en el Congreso”.
Por otra parte, el presidente de los dentistas planteó que “en una profesión tan sensible para la nuestra, tan importante para la salud de nuestros compatriotas, no hay ninguna regulación en la formación. Es por eso que estamos exigiendo acreditación obligatoria de las carreras de odontología y examen nacional para todos los que quieran ejercer en Chile, de modo de garantizar que las personas reciban la atención de excelencia que históricamente fuimos capaces de dar”.