Colegio de Nutricionistas advierte que normativa que los incorpora a los colegios duerme en el Congreso

El vocero del Colegio de Nutricionistas, Paolo Castro, señaló su preocupación por la lentitud  en el Congreso respecto a la incorporación de nutricionistas a los establecimientos educacionales, considerando que la moción parlamentaria para introducir este tipo de profesionales a los colegios aún no se mueve de su lugar desde el año 2012, y al carecer de voluntad política para su aprobación, dado que no presenta urgencia, cumplirá cuatro años durmiendo en el Congreso.

La normativa indica: “Es necesario contar con un profesional nutricionista que se encargue de prestar la asesoría pertinente en materia de alimentación y nutrición, educando a la comunidad educativa respecto de los hábitos de una alimentación saludable, verificando un menú acorde con esa premisa en los establecimientos que ofrezcan una cartilla de alimentación, y obrando en conjunto con los demás profesionales del establecimiento, en los casos de los alumnos que sufren de sobre peso y obesidad, con el objeto de dar un tratamiento integral a su problema”.

“Debemos tomar en cuenta que hoy el colegio es el lugar en el que los niños pasan gran parte del día. Muchos tienen jornada completa y además de las colaciones, deben incluso almorzar dentro del establecimiento. Por eso es fundamental que desde los jardines infantiles, se cuente con un profesional que asegure la buena alimentación de los más pequeños. Debemos preocuparnos de este mal, que es un verdadero cáncer en nuestra sociedad”, señala Paolo Castro, vocero y colaborador del Colegio de Nutricionistas Universitarios de Chile.

Además, el nutricionista entrega seis buenas razones por las cuales es imprescindible contar con este tipo de profesionales en los colegios, el inicio de una lucha contra la obesidad infantil, que cada vez es mayor en nuestro país.

1. Ser contraparte de los casinos que existen al interior de los establecimientos, velando por el cumplimiento de la inocuidad (higiene) y opciones saludables.
2. Supervisar que cafeterías y kioscos ubicados al interior de los establecimientos, cumplan con normas de inocuidad (higiene) y opciones saludables de alimentación.
3. Generar espacios saludables para la comunidad escolar, con apoyo mancomunado de otros organismos científicos, estatales, no gubernamentales y privados de modo de, mejorar la oferta y consumo de agua, frutas, verduras, pescado entre otros, así como también la incorporación de actividades curriculares asociadas a la producción alimentaria (huertos escolares) y preparación de alimentos (Culinaria y dietética).
4. Contribuir a la disminución de la prevalencia de obesidad infantil, a través del apoyo profesional de nutricionistas a las familias involucradas.
5. Implementar la Ley “Súper 8” nº 20.606, que incorpora modificaciones sustanciales al tipo de alimentos que se pueden vender al interior de las escuelas y su respectivo monitoreo nutricional.
6. Entregar asesoría a padres y apoderados en el envío de colaciones, de modo de contribuir a la disminución de azucares, sal y Calorías de los niños/as.

“Son pequeños pasos que pueden ser el inicio de una batalla real contra la obesidad y que nos ayudará como país a controlar un flagelo que va en aumento. Necesitamos urgente tomar medidas y entregarle el valor real al nutricionista, logrando que sea obligatoria su presencia en todos los establecimientos, ya sean privados o no”, concluyó Paolo Castro.