En estos padecimientos son fundamentales el tabaquismo, la contaminación ambiental y el peso corporal
En los últimos 30 años se registró un aumento en las muertes y discapacidades por enfermedades respiratorias crónicas en el mundo, reveló esta semana un estudio que se publicó en la revista The BMJ.
De acuerdo con el estudio que desarrollaron investigadores de China, quienes analizaron datos de 195 países, estos padecimientos representan un importante problema de salud pública, con un estimado de 3,9 millones de muertes en 2017, que representan el 7 % de todas las muertes en todo el mundo.
Las afecciones más comunes durante la última década fueron la enfermedad pulmonar crónica (EPOC) y el asma, y entre los factores de riesgo se cuentan el tabaquismo, la contaminación ambiental y el peso corporal.
Le siguen la neumoconiosis (enfermedad pulmonar debido a la inhalación de polvo), la enfermedad pulmonar intersticial y la sarcoidosis pulmonar (debido a cicatrización e inflamación pulmonar), reseñó Europa Press.
Entre 1990 y 2017, el número de muertes por enfermedades respiratorias crónicas aumentó en un 18 %, de 3,32 millones en 1990 a 3,91 millones en 2017. El incremento se dio con la edad y aumentó bruscamente en los mayores de 70 años, una carga que probablemente aumentará a medida que la población mundial envejezca, indicaron los investigadores.
Fumar fue el principal factor de riesgo de muerte y discapacidad debido a la EPOC y el asma, la contaminación por partículas en el aire fue el segundo y un alto índice de masa corporal también ha representado la mayoría de las muertes por asma desde 2013.
«A medida que la prevalencia de obesidad continúa aumentando a un ritmo preocupante en todo el mundo, la pérdida de peso debe incluirse en el tratamiento de pacientes obesos con asma», indicaron los investigadores.
Según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud, hay unos 235 millones de personas que padecen asma, 64 millones que sufren de EPOC, y muchos millones de personas más que sufren rinitis alérgica y otras ERC que a menudo no llegan a diagnosticarse.
Fuentes: Europa Press, OMS.