Cuando existe una falta de irrigación sanguínea al cerebro puede producirse un infarto cerebral, también conocido como derrame cerebral. En este fenómeno suele morir una parte del cerebro, por lo que sus efectos son irreversibles.
Según la Organización Mundial de la Salud el infarto cerebral podría convertirse en la primer causa de muerte para el 2020 en el mundo.
Las personas que más son propensas a sufrir un derrame cerebral son las que sufren de presión arterial elevada, diabetes, obesidad o sobrepeso y problemas cardiacos. Y según un nuevo estudio de investigadores de la Universidad de Tokio existe una fuerte correlación entre las personas que no pueden permanecer mucho tiempo parados únicamente sobre una pierna.
En el estudio se analizaron a 1, 300 personas. Aquellas que no pudieron sostenerse al menos 20 segundos sobre una pierna (1/3 del grupo) registraron más problemas cognitivos. Pero además, este fenómeno está asimismo relacionado a una mayor propensión a un infarto cerebral, según los investigadores.