El incremento de peso en la población se ha convertido en una amenaza para la vida sexual; pero esto va más allá de ser un problema de apariencia o de estar gordo, ya que esta situación ocasiona diferentes problemas que van desde la falta de deseo sexual, la infertilidad o afectaciones emocionales.
De acuerdo con cifras de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), el 70% de los mexicanos padece sobrepeso. Una forma de revertir esto es cambiar los hábitos alimenticios y realizar actividad física.
En este caso, las mujeres con sobrepeso son las que buscan protegerse más desde un punto de vista sexual. Muchas se sienten frustradas con su aspecto físico y no se arriesgan a vivir una “aventura”, porque no se sienten confiadas de que alguien más las vea desnudas.
En ellos:
1. Síndrome del pene enterrado
Los abultamientos que ocasiona la grasa en el abdomen hacen ver a tu “amiguito” más pequeño de lo que realmente es, lo que evidentemente te afecta sexual y emocionalmente.
2. Baja calidad en el semen
Los kilos de más causan oligospermia, o lo que es lo mismo, un bajo número de espermatozoides en cada eyaculación.
3. Disfunción eréctil
Este problema se deriva de la oclusión o bloqueo en los vasos sanguíneos, lo que impide el correcto flujo de la sangre al pene, por lo que no podrás mantener una buena erección.
En ellas:
1. Anorgasmia
Es la falta de irrigación sanguínea que ocasiona que no llegue la suficiente sangre al clítoris y no permite una lubricación vaginal adecuada, lo que te dificultará (o impedirá) llegar al orgasmo.
2. Alta probabilidad de aborto
Las mujeres con sobrepeso y obesidad son más propensas a padecer problemas de fertilidad, al presentar frecuentemente, anomalías cromosómicas.
En ambos:
1. Dificultad en las relaciones sexuales
Las personas con “kilos extra” se cansan rápido durante el sexo a pesar de que sus movimientos sean limitados. Tampoco le podrán dar variedad al momento, ya que sus opciones en cuanto a posiciones sexuales se verán muy limitadas.
2. Disminución de la libido
El sobrepeso genera un desequilibrio hormonal que causará que ¡no tengas ganas de sexo! Sí, esto es posible debido a que se reducen los niveles de testosterona, lo cual influye directamente en el deseo de hombres y mujeres.
Las personas “gorditas” también presentan altos niveles de estrés, lo que les baja el apetito sexual. Pero cuando el estrés, la irritabilidad y la ansiedad se juntan, pueden afectar seriamente la relación de pareja.
Así que ya lo sabes, además de las graves complicaciones a la salud, la obesidad puede frustrar tu vida sexual, así que ¡actúa!
Vía: De10.com
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