Estrés Parental: por qué los padres están más agotados actualmente

El psicólogo Mauricio Strugo señaló que el intenso compromiso de los padres con la crianza, junto con la falta de tiempo para el descanso, genera un estrés crónico

Lizzette Vela

30/08/2024 3:49pm

El estrés parental alcanzó niveles críticos en la actualidad, convirtiéndose en un tema urgente de salud pública, según el director de sanidad de Estados Unidos, Dr. Vivek Murthy. Una reciente encuesta de la Asociación Estadounidense de Psicología (APA) reveló que casi el 50% de los padres se siente abrumadoramente estresado todos los días, en comparación con el 25% de las personas sin hijos. El 66% de los padres también reportan preocupaciones económicas severas, frente al 39% de otros adultos.

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Murthy destacó que el estrés parental puede deteriorar la salud y el bienestar, afectando negativamente a los hijos. Lorena Ruda, especialista en crianza, explicó que el estrés surge de la constante multitarea que los padres enfrentan, equilibrando el trabajo, la crianza y las tareas del hogar. Aunque la distribución de tareas entre padres ha mejorado, las exigencias actuales han aumentado significativamente.

María Agustina Capurro, psicóloga perinatal, añadió que el estrés parental es un fenómeno social con implicaciones clínicas, exacerbado por la falta de redes de apoyo y políticas adecuadas. En Argentina, las preocupaciones económicas y la inseguridad laboral también contribuyen al aumento del estrés en los hogares.

El psicólogo Mauricio Strugo señaló que el intenso compromiso de los padres con la crianza, junto con la falta de tiempo para el descanso, genera un estrés crónico que puede llevar a tensiones familiares e incluso separaciones. Además, una encuesta revela que el 65% de los padres y el 77% de los padres solteros sienten soledad, en contraste con el 55% de los que no tienen hijos.

Para enfrentar este problema, Murthy propone que gobiernos, empresas y familias adopten medidas que faciliten la flexibilidad para el cuidado infantil. También enfatiza la importancia de restaurar redes de apoyo que históricamente ayudaron en la crianza. Capurro coincide en la necesidad de políticas públicas que regulen la conciliación entre la vida laboral y familiar.