El reciente cierre de la unidad de cuidados intensivos, la UCI pediátrica del hospital Padre Hurtado en San Ramón ocurrida el miércoles pasado, puso de manifiesto la situación actual de la salud pública y la gravedad de la falta de especialistas y equipamientos que se traduce en las famosas listas de espera, las cuales registran miles de pacientes que aguardan por una consulta médica con un especialista o por una intervención quirúrgica, espera que puede durar incluso más de un año.
Ante esa gota que rebalsó el vaso, distintas autoridades han adjudicado estas listas a la administración anterior y han indicado que se “heredó” un problema que supuestamente no existía. El senador y presidente de la comisión de salud del Senado, Guido Girardi señaló que: “No empezó ahora, somos herederos de haber tomado en el pasado decisiones incorrectas y cuando llega la Presidenta Bachelet tenemos cerca de 3 millones de personas en lista de espera, incluso algunos desde el 2011-12; nos encontramos con un sistema con la mitad de las camas básicas, UCI y UTI, que debiera tener; donde faltan 2.500 especialistas en los hospitales y 1.600 médicos en los consultorios y estos carecen de capacidad resolutiva”.
Sobre la existencia de las listas de espera, Girardi indicó que se han hecho esfuerzos para terminar con ellas. Sin embargo, indicó que mientras no exista la infraestructura y los médicos será difícil terminar con el conflicto y la espera. Además, recalcó que el problema “tiene su génesis cuando se aprueba el Auge y la derecha votó contra el financiamiento, pese a que se requería recursos cuantiosos para garantizarle a la población el conjunto de prestaciones de calidad y oportunas. Esto obligó a comprarle a privados y el problema se fue agravando, pues el sistema privado comenzó a llevarse a los médicos y al personal del sistema público para satisfacer la demanda y como ellos no hacen formación los hospitales públicos se han ido vaciando”. Además, Girardi enfatizó en que “se debe tomar una política de Estado, una política nacional, porque este es un tema muy relevante. Me parece que el Gobierno va por el camino correcto, pero no es algo que sólo lo pueda resolver Salud. Tenemos que ser más activos, entre Salud, Hacienda y el conjunto de la sociedad de volver a privilegiar la atención pública pues es la única que hace posible resolver el problema”.
En cuanto a la situación de los pacientes del hospital Padre Hurtado de la comuna de San Ramón, ayer la subsecretaría de Redes Asistenciales, Angélica Verdugo señaló que ningún niño se quedará sin atención, pues quienes demanden atención de cuidados intensivos serán derivados a los centros asistenciales más cercanos en La Florida y Puente Alto. Incluso señaló que de no haber espacios en la salud pública, podrán atenderse en centros privados.
Sin embargo, las listas de espera en el resto de los consultorios y hospitales del país dependerán de la contratación de especialistas que puedan cubrir las necesidades específicas que demanda la población.