Las caricias son un analgésico potente para calmar los dolores en los bebés

El tacto parece que es un potencial analgésico, sin efectos secundarios

Charilin Romero

19/12/2018 11:53am

El contacto físico es vital para el desarrollo del ser humano, también en las relaciones afectivas juegan un papel importante para el cariño, rebajar el estrés y estrechar lazos e intimidades. Además, una caricia a parte de dar un mensaje esperanzador en las personas, permite aliviar el dolor en los bebés.

Así lo concluyen los investigadores de la Universidad de Oxford en colaboración con la Universidad de Liverpool que realizaron un estudio, donde hallaron que acariciar suavemente a un bebé reduce la actividad cerebral asociada con experiencias dolorosas. Pese a que se desconozca su origen.

Durante el estudio fue monitoreada la actividad cerebral de 32 bebés cuando simultáneamente eran pinchados para realizarles un análisis de sangre, cuyos datos arrojaron que la mitad de los infantes acariciado con un cepillo suave tuvo 40% menos de actividad de dolor en su cerebro.

Dejan de llorar cuando sienten tus manos o brazos

La doctora Rebeccah Slater, integrante del equipo que realizó el análisis, explicó que «el tacto parece tener un potencial analgésico sin el riesgo de desencadenar efectos secundarios», así mismo reiteró que la velocidad óptima para reducir el dolor en los bebés era de aproximadamente 3 centímetros por segundo.

«Los padres acarician a sus bebés intuitivamente a esta velocidad óptima. Si podemos entender mejor los fundamentos neurobiológicos de técnicas como el masaje infantil, podemos mejorar los consejos que damos a los padres sobre cómo consolar a sus bebés», insitió la especialista.

Detalló que esa velocidad de caricias activa una clase de neuronas sensoriales en la piel de los bebés llamadas fibras aferentes C-táctiles y que en años anteriores, se había demostrado que reducen el dolor en los adultos. Pero, no estaba claro si los bebés tenían la misma respuesta o si se desarrolla con el crecimiento, aclaró la experta.

«Encontramos evidencias que sugieren que los aferentes C-táctiles pueden activarse en los bebés y que un contacto lento y suave puede provocar cambios en su actividad cerebral «, dijo la profesora Slater.

El tacto ayuda a sentirse protegidos

Vínculo entre los padres y la prole

La doctora hizo referencia a que trabajos de investigaciones han demostrado que el contacto físico puede aumentar el vínculo entre los padres y los hijos, así como reducir el estrés en los adultos e infantes. Además, reduce la estancia del niño en el hospital.

Adelantó que el próximo estudio está destinado a analizar a bebés prematuros, que al nacer aún tienen los nervios sensoriales en desarrollo.

Según Caroline Lee-Davey, directora ejecutiva de Bliss, una organización benéfica para bebés prematuros y enfermos, sostiene que esta nueva investigación sugiere que el contacto con los padres también podría ayudar a aliviar el dolor en los bebés, cuyos estudios serán financiados el próximo año por la Universidad de Oxford.

Las caricias ayudan a que la mejoría del bebé sea más rápido

«Ya se sabía que el contacto piel con piel marca la diferencia para los bebés en el cuidado neonatal y también ayuda a los progenitores a desarrollar un vínculo con su hijo», aseguró Lee-Davey, al hacer un llamado a los padres a valorar el contacto piel a piel.

«Muchas personas no se dan cuenta de la cantidad de procedimientos médicos que se practican a un bebé en cuidados neonatales durante su estancia en el hospital, incluso las caricias», afirmó Lee-Davey.