Sabrina Jales St. Pierre modelo de nacionalidad brasileña, demando por daños al hotel Embassy Suites, perteneciente a la cadena hotelera Hilton en Palm Desert, ubicada en el estado de California de los Estados Unidos de Norteamérica, donde según declaraciones de la afectada, fue víctima de múltiples picaduras de unos insectos llamados chinches, que le ocasionaron hinchazón y marcas en la piel durante el tiempo que duró su estadía dentro del mencionado hotel en el año 2016.
Demandan hotel
Fuente: booking
La profesional del modelaje, quien cuenta con la realización de importantes campañas con marcas como Victoria’s Secret, Ralph Lauren, Valentino, Versace y Tommy Hilfiger, afirma que en su momento fue “masacrada” por los chinches y que exige compensación de carácter monetario, además del respectivo castigo que su caso amerita en contra del mencionado hotel.
Joven brasileña
La joven Sabrina comentó que las picaduras se empezaron a ver en ciertas partes de su cuerpo, poco después de haber pasado su primera noche, hecho que continuó extendiéndose posteriormente al resto de su cuerpo cubriéndolo casi en su totalidad.
Por su parte el abogado, Brian Virag especialista en este tipo de casos, calificó que el episodio vivido por su representada, Jales St. Pierre, es el más bochornoso incidente que jamás el haya visto, durante sus 8 años de carrera dentro del ámbito de las leyes.
En el mismo orden de ideas, se ha podido conocer que la reconocida modelo, al igual que otras personas víctimas de ataques de los mencionados insectos, padeció fuertes pesadillas que le causaron un trauma psicológico y una aversión total a los chinches, afectación de salud que padece hasta la presente fecha.
El profesional del derecho culminó diciendo que, el incidente sufrido por su defendida, aparte de ser altamente doloroso, fue especialmente vergonzoso porque ha debido continuar con su agenda de trabajo en dicho escenario con las marcas dejadas por estos insectos, puesto que como herramienta de trabajo (modelaje), es su cuerpo, lo que la llevo a sentir una profunda humillación y vergüenza.