Tener relaciones sexuales es una de las actividades más placenteras que pueden disfrutar las personas. Sin embargo, en muchos casos, este placer se convierte en dolor.
Existen mujeres e incluso hombres que presentan dolor antes, durante o después de la penetración. Aunque sea una situación frecuente no debe considerarse normal. Si hay dolor, algo está mal.
Las causas de este dolor, que se conoce como dispareunia, pueden ser variadas. Entre ellas están ciertas posiciones sexuales, reacciones alérgicas, irritación, infecciones y lesiones genitales; resequedad vaginal, factores emocionales y psicológicos. Existen diversas alternativas para eliminar el dolor durante la penetración.
1. Si el dolor se debe a resequedad vaginal use lubricante; los que son solubles en agua son una buena opción. Evita usar vaselina o aceites, ya que esto podría romper el preservativo y contraer algún tipo de infección de transmisión sexual.
2. Disfruta del juego previo a la penetración, de esta forma ambos estarán más excitados y alcanzarán mayores niveles de placer.
3. Si hay algunas posiciones sexuales que te son dolorosas, evítalas y practica las que te resultan más placenteras.
4. Recuerda que el sexo no sólo es penetración. Prueba con sexo oral o la masturbación mutua. Explota tu erotismo con masajes, juegos, películas, juguetes, etc.
Si el dolor es persistente, no lo dejes pasar y consulta a un especialista que te ayude a determinar las causas y a tratar este problema. Evita las complicaciones y recobra el placer al tener sexo.