¿Qué personas son más propensos a engañar? Hay algunas formas simples de atrapar a los famosos, si usted sabe cómo buscar.
Según el antropólogo y experto en infidelidad, Dra. Helen Fisher, hay rasgos de la personalidad que y factores que aumentan las probabilidades de que su pareja pueda caer en el engaño.
Escribiendo en su libro «Anatomía del amor: Una historia natural de apareamiento, el matrimonio, y por qué nos desviamos», la experta en sexo explica cinco señales que suelen ser un patrón en la conducta de los infieles.
1. Infancia inestable
Sea o no usted un infiel, tiene serias posibilidades de convertirse en un engañador si tuviste una infancia complicada.
Más específicamente, todo se reduce a la relación de una persona con sus padres. Así que cuidado con la forma en que interactúan con mamá y papá si sospecha que su pareja puede ser una rata en el amor.
Helen dijo: «Los hombres y las mujeres que estaban conectados de forma segura a sus padres durante la infancia tienden a crear asociaciones más estables y caen más fácilmente infidelidad, mientras que los que estaban mal amarrados a las figuras parentales son más propensos a ser mujeriegos».
2. Personalidad
Las personas salientes, aventureros o aquellos que disfrutan de nuevas experiencias tienden a ser más propensos a jugar fuera de la relación. Aquellos que desean siempre expandir su mente, a menudo no pueden resistir los impulsos del cuerpo.
Además de esto los que «son menos conscientes, menos agradables y más neuróticos» tienden a ser adúltera.
3. Potencia juego
Las mujeres que llevan los pantalones en la relación son más propensas a buscar otras parejas sexuales a causa de un desequilibrio de poder.
Helen dijo: «Las casadas que declaran siempre salirse con la suya con más frecuencia durante los desacuerdos son más propensos a tener relaciones extramaritales.»
Los que son más populares o «socialmente deseables» corren también un riesgo de ser infieles debido a que las personas siempre sentirán alguna atracción o debilidad por ellos.
4. La educación y los ingresos
Generalmente las personas con mayores ingresos económicos tienen más probabilidades de disfrutar de relaciones sexuales con otras personas, mientras que la persona que no es el sostén de la relación tiende a ser más fiel.
Un dato señala que las mujeres estadounidenses son más propensas a buscar el placer en otros lugares si son más inteligentes que sus parejas.
5. Todo esto es sólo el ADN
Algunas personas creen que hay en realidad una trampa en los genes.
Un reciente estudio realizado en 181 hombres y mujeres por investigadores de la Universidad de Binghamton, ha sugerido que la mitad de todas las personas tienen un gen que los hace propensos a dormir con otras personas que no sean sus parejas.
Se descubrió que los que tienen el gen DRD4 «eran más propensos a tener una historia de sexo sin compromiso, incluyendo una sola noche y actos de infidelidad», según el investigador principal, Justin García.