Las 7 prácticas sexuales más peligrosas que pueden poner en riesgo tu vida

No siempre todo lo que tiene que ver con el sexo es placentero. Existen ciertas prácticas sexualesque te pueden enfermar, lastimar y hasta terminar con tu vida. Conócelas ahora mismo para dejarlas fuera de tu rutina sexual y elegir mejores formas de obtener placer.

#1 Sado-masoquismo extremo

El sado-masoquismo es un fetiche sexual que encuentra a los azotes, golpes, etc. sexualmente estimulantes. Cuando esta práctica llega a un grado extremo, los actos y torturas se vuelven más violentos, lo cual amenaza significativamente la salud de las personas participantes.

#2 Hematolagnia

Es otro fetiche sexual que busca la satisfacción a través del sangrado. Se relaciona al vampirismo y puede ser extremadamente peligroso por el riesgo a infecciones o desangrado.

#3 Asfixia autoerótica

Consiste en cortar el suministro de oxígeno al cerebro mediante la asfixia con una bolsa plástica, estrangulación o compresión torácica cuando se llega al orgasmo, lo que supone una sensación de vértigo ultra placentero. Es un acto por demás peligroso que te puede llevar directamente a la muerte.

#4 Pirofilia

Es un fetiche que implica la obtención de placer sexual con el uso del fuego en la relación. Por supuesto, es peligroso porque puede ocasionar graves quemaduras o un incendio incontrolable.

#5 Omorashi

Es una peligrosa práctica común en la cultura japonesa. Se trata de lograr excitación por tener la vejiga totalmente llena. Es muy doloroso y puede ocasionar infecciones o problemas urinarios graves.

#6 Mecanofilia

Es cuando las personas se sienten extrañamente atraídas (sexualmente) por objetos mecánicos, que pueden ser desde una bicicleta hasta una aspiradora. Participar en alguna de estas prácticas utilizando objetos afilados o sucios, pueden llevarte a sufrir cortaduras, moretones y peligrosas infecciones. Lo mismo vale cuando se introducen en el cuerpo cualquier tipo de artículo que no sea un juguete sexual apto.

#7 Compartir juguetes sexuales

Los sex toys son personales y no deben prestarse. Usar uno que alguien te dio sin que sea nuevo, puede hacerte contraer peligrosas infecciones o enfermedades mortales. ¡Mejor tener uno propio!

El sexo peligroso deja de ser placentero cuando trae problemas en la salud o lleva a la muerte a alguno de sus participantes.