Stephanie Jaeger y su marido Michael se llevaron la mejor sorpresa. Ella fue a que la operaran por unas piedras en los riñones y salió con un bebé en brazos. No sabía que estaba embarazada.
Stephanie fue al médico por lo que creía, se trataba de cálculos renales. En el hospital Piedmont Henry de Stockbridge, Georgia, Estados Unidos le dieron una sorpresa que los dejó completamente atónitos: el dolor se debía a que estaba cursando el noveno mes de embarazo.
«No hay palabras para describir las sensaciones relacionadas a que te digan que tendrás un bebé en 30 minutos», contó Michael, el flamante papá.
«Recién cuando oímos el latido del corazón (del bebé), la realidad se impuso», agregó.
Entonces, nació Shaun, con un peso de 3,3 kilos e indicadores de un bebé saludable. «Steph fue diagnosticada con pre-menopausia hace un tiempo atrás, lo que justificaría el desequilibrio hormonal, también asociado con un embarazo», explicó acerca del motivo por el que no advirtieron el embarazo.
Además, la posición del bebé «le impedía moverse para indicar a Steph que estaba allí» y también remarcó que «la parte más extraña es que ella siguió teniendo un ciclo menstrual». La pareja ya tenía otros tres hijos. Tras dar a luz a su última hija, los médicos le dijeron que era poco probable que fuera capaz de tener otro bebé. Pero no fue así. Mirá las fotos del bebé a continuación.