Le siguen San Francisco y Nueva York con las rentas más elevadas
Hong Kong, región administrativa especial de China, es una ciudad famosa por su vibrante desarrollo económico. Su centro urbano activo, densamente poblado, es un importante puerto y un centro financiero global con un paisaje lleno de rascacielos que atrae a muchos.
Sin embargo, vivir en Hong Kong es toda una hazaña por las altas sumas que debe pagar mensualmente quien desee fijar residencia en la urbe situada en el sureste de la República Popular China.
Según un informe de Deutsche Bank, Hong Kong es la ciudad donde el alquiler de vivienda es el más alto del mundo. Rentar un apartamento de dos habitaciones en este territorio autónomo chino puede costar 3.750 dólares (3.300 euros) mensuales, reseñó la revista Forbes.
La ciudad se ha vuelto famosa, entre otras cosas, por los astronómicos precios que se manejan en su mercado inmobiliario, con cotizaciones tan sorprendentes, como la de una plaza de garaje en un barrio residencial que se vendió recientemente por más de 600.000 euros, lo que está generando un problema de oferta para atender la creciente demanda de vivienda en una economía muy dinámica.
Una opción que ha creado cierta polémica es la aparición de las viviendas-nicho, en las que habitan en la actualidad unas 200.000 personas, según cifras oficiales. Estas microviviendas tienen apenas 5 metros cuadrados, la mitad de una plaza de garaje pequeña, y algo inferior a las celdas de las prisiones de máxima seguridad de la ciudad.
Otras ciudades con los alquileres más caros
San Francisco es la segunda urbe con los alquileres más caros. El efecto de expansión económica de Silicon Valley ha disparado sus precios inmobiliarios con lo que alquilar la misma vivienda de dos habitaciones supondría el desembolso de 3.664 dólares (3.200 euros) al mes.
En Nueva York, con el tercer puesto, sería de 2.854 dólares (2.500 euros).En el Viejo Continente, los precios de las principales ciudades están aún muy por debajo de los de Hong Kong, pero en París y Londres se paga hasta 2.400 dólares (2.100 euros) por una vivienda en alquiler con dos habitaciones.
La capital alemana ha tenido un auge espectacular en los últimos años y su mercado aún ofrece precios comparativamente más bajos, aunque sigue siendo uno de los de mayor expansión.