«A menudo olvido mi estatura, pero el entorno físico y la sociedad me lo recuerdan”, dijo la activista.
La joven irlandesa Sinéad Burke padece acondroplasia, la forma más corriente de enanismo.
Hace un tiempo, participó en una charla TED titulada “Por qué el diseño debería incluir a todos”. Aprovechó la oportunidad para cuestionar a la industria del diseño, por su incapacidad de adaptarse a personas con necesidades especiales. Sus palabras sirvieron para que la industria de la moda activara sus radares.
“El diseño inhibe mi autonomía y mi independencia. A menudo olvido mi estatura, pero el entorno físico y la sociedad me lo recuerda”, dijo en la conversación.
Burke es escritora, académica, influyente activista por la inclusión y locutora irlandesa. Apareció en la portada de The Business of Fashion en 2018 y desde ese momento su nombre comenzó a sonar en todas partes, informó el diario Clarín.
Su guardarropas está repleto de prendas de marcas de lujo Gucci, Ferragamo, Prada, Burberry, y otras firmas adaptadas a su estatura. Pero fue un largo camino el que tuvo que recorrer hasta cuestionar públicamente al mundo de la moda y (finalmente) ser escuchada.
Es común ahora verla en la primera fila de los desfiles (se la vio en el de Victoria Beckham en Londres sentada junto a Helen Mirren) y también ver a los paparazzi correr tras ella.
Podría decirse que se volvió la niña mimada: las marcas estuvieron a sus pies hasta brindándole un banquito para que usara de escalón y pudiera sentarse cómodamente en los desfiles.
Y el poder de su discurso no tardó demasiado en darle la atención que merecía. ¿El resultado? fue invitada a dar varias conferencias en el Foro Económico Mundial en Davos y el Consejo de Estado de Irlanda la fichó entre sus miembros como asesora en temas de accesibilidad y educación.
Rompiendo barreras
También se convirtió en la primera persona con acondroplasia en acudir a la gala MET. Para la ocasión, Alessandro Michele, Director Creativo de Gucci, adaptó uno de los vestidos de su colección a sus medidas.
“Tuvimos mucho cuidado de llevar algo que no fuera un disfraz, sino un reflejo de mí como persona”, sentenció.
Además, en la última alfombra verde fue la encargada de darle a la icónica modelo Doutzen Kroes el premio The Social Media Changemaker Award.
Burke asegura que si tuviera una varita mágica la usaría para democratizar oportunidades y recursos que garantizaran la igualdad de acceso e inclusión para todos. “No cambiaría quién soy”. Esa fue la contundente respuesta de Sinead Burke a una pregunta que dudosamente le volverán a hacer.
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