Un niño de 11 años de edad desató una persecución policial en la ciudad de Cleveland, Ohio, en los Estados Unidos (EE. UU.), luego de que su madre le quitara el PlayStation, destacaron medios locales citados por RT.
El incidente ocurrió la noche del pasado domingo, cuando tras una discusión el menor tomó la llave del vehículo de su madre y arrancó. Un policía notó que al volante de un todoterreno se desplazaba un niño y se acercó para ver si necesitaba ayuda, pero el coche aceleró y empezó la persecución.
Durante la huida el menor llegó a alcanzar velocidades superiores a los 140 kilómetros por hora, y el oficial que lo perseguía le perdió de vista. La policía retomó la persecución unos kilómetros después y terminó cuando el vehículo del menor se volcó al estrellarse contra un camión estacionado.
El pequeño fue llevado a un hospital, donde se le atendió por unos rasguños y cortes en la mano, para luego ser detenido. Aún no se han presentado cargos formales en su contra. El menor sufre de déficit de atención e hiperactividad, trastorno bipolar y trastorno oposicional desafiante.
No es la primera vez que el niño ha protagonizado una persecución policial. En octubre del 2017 también tomó el todoterreno de su madre y se abrió camino a velocidades de hasta 160 km/h en una persecución de una hora a través de tres condados.
En esa ocasión fue procesado por un tribunal de menores, pero fue declarado incompetente para ser juzgado y los cargos fueron desestimados. Dos semanas antes de eso, ya se había puesto al volante del auto de su madre por primera vez y se vio obligado a detenerse luego de que tres neumáticos del vehículo reventaran. En esa ocasión el pequeño dijo que había tomado el vehículo porque estaba aburrido.
Aquí el video:
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