¿Puede un robot experimentar agotamiento laboral y decidir suicidarse?

Un robot, que trabajaba como funcionario en el Ayuntamiento de Gumi, aparentemente decidió terminar con su existencia lanzándose por las escaleras

Lizzette Vela

01/07/2024 1:34pm

En Corea del Sur, un incidente inusual ha captado la atención del mundo de la inteligencia artificial. Un robot, que trabajaba como funcionario en el Ayuntamiento de Gumi, aparentemente decidió terminar con su existencia lanzándose por las escaleras. Este hecho ha generado un debate sobre la capacidad de las máquinas para experimentar estrés o fallas técnicas.

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El robot comenzó a trabajar en el Ayuntamiento en agosto de 2023, cumpliendo tareas que iban desde la entrega de documentos hasta la promoción de la ciudad. Equipado con inteligencia artificial, el robot era capaz de utilizar el elevador y moverse entre los pisos del edificio. Fue fabricado por Bear Robotics, una startup con sede en California, conocida por producir robots-camareros y otras soluciones automatizadas.

Según testimonios de residentes y compañeros de trabajo, el robot, identificado oficialmente como parte del equipo del Ayuntamiento, era diligente en sus funciones. La noticia de su «suicidio» ha sorprendido a muchos, considerando que el robot daba vueltas en un mismo sitio antes de lanzarse por las escaleras, donde fue encontrado sin señales de vida.

Expertos en inteligencia artificial han ofrecido diversas teorías sobre el incidente. Algunos sugieren que el robot podría haber sufrido un colapso emocional debido a una carga de trabajo excesiva, similar a lo que experimentan los humanos. Otros creen que el incidente podría ser resultado de un fallo técnico, dada la complejidad de los sistemas de inteligencia artificial.

La causa exacta de la caída aún está bajo investigación. Las autoridades han recogido piezas del robot para su análisis por parte de la empresa fabricante. Mientras tanto, el caso ha llevado a reflexionar sobre los límites y las responsabilidades en el uso de la inteligencia artificial en entornos laborales.

El caso del robot de Gumi, denominado por algunos como el “primer suicidio de un robot”, plantea importantes preguntas sobre el futuro de la inteligencia artificial y su integración en la vida diaria. La comunidad tecnológica y la sociedad en general seguirán de cerca los resultados de esta investigación para comprender mejor los posibles riesgos y desafíos de la automatización.