El crudo testimonio de Nabila Rifo sobre su agresor: «No quería decir la verdad»

El caso de Nabila Rifo ya ha aparecido por todos los medios de nuestro país. La mujer de 28 años fue atacada hace unos meses, afuera de su casa, en un sector de Coyhaique. Muchas versiones de los hechos se han dado, pero hasta hace poco, era la voz de la propia víctima la que faltaba por escuchar. 

Hace un par de días, Rifo se atrevió a dar su versión de la historia, reconociendo a su ex pareja, Mauricio Ortega, como el responsable. Según el fiscal Pedro Salgado, la mujer aprobó este argumento, agregando que «Decidí decir la verdad. Nunca más podré ver en la vida».

Nabila contó su versión de los hechos, tras haber guardado silencio mientras sigue recuperándose y adaptándose. Antes del ataque se encontraban en una celebración en su casa, y reafirmó que en el transcurso de la noche se creó un ambiente de tensión con su ex pareja.

«Cuando terminaron de comer se quedaron todos compartiendo en el living. Yo también. Mis hijos, los dos más chicos estaban durmiendo y los dos más grandes estaban jugando Play en el segundo piso. Como a la una o dos de la madrugada bailamos y en eso empezó una mala onda entre Mauricio y yo».

«Esto lo empecé a recordar cuando llegué a Coyhaique», aseguró Rifo, quien se encuentra en una casa arrendada por el Estado mientras adaptan la vivienda de su madre para su nueva discapacidad. Agregó que: «Cuando estaba en Santiago soñaba cosas. Como que mi mente divagaba, y para recordar todo esto me ha servido hablar con los psicólogos. Es primera vez que relato esto y primera vez que se me toma declaración».

«Él estaba curado. Yo también estaba con trago. El empezó a gritar ‘esta mierda nunca se conforma con nada’, empezó a romper los vasos y trataba de pegarme mientras Juanito y su primo lo agarraban de los brazos. Él, con todo quería pegarme. Esto pasaba en el living».

«Salí arrancando de la casa, salí con lo que tenía puesto. Vi que Mauricio, alegando medio curado estaba en el patio (…). Creo que las llaves del auto -las mismas que se encontraron a su lado tras el ataque- estaban colgadas. No las recuerdo, pero yo no las tenía, porque yo no sé manejar».

En un artículo publicado por La Tercera se muestran las declaraciones de Nabila. En este se comentó que la mujer afirmó a los fiscales que fue su ex pareja quien la golpeó con sus manos, y le dio patadas en el suelo, hasta recibir un golpe en la cabeza (con un bloque de cemento) tras lo que no recuerda más.

Por precaución, la Corte de Apelaciones ha decidido mantener a Ortega en prisión preventiva. Por su parte, la víctima reconoció que al comienzo «No quería decir la verdad. Pero cuando llegué a Coyhaique y ya estuve en mi casa, estar con mis hijos, mi mamá y ver todo el sufrimiento, decidí decir la verdad».

Al darse cuenta de que «nunca más podré ver en la vida» fue que Rifo quiso enfrentar la situación y comentar lo que recordaba de aquella trágica noche.

Hay quienes han estudiado los antecedentes de Rifo, y recorrer su historia para intentar comprender más el caso. Así, Rifo también aclaró el tema, después de algunas dudas sobre si habría ejercido prostitución:

“Me salí de octavo básico porque mi papá falleció y comencé a cuidar a mis hermanas. Creo que en esa época tenía 13 años. Mi papá era ayudante de mecánico y era el que sostenía la casa. Mi mamá era dueña de casa y cuando él falleció tuvo que empezar a trabajar y yo tuve que cuidar a mis hermanas. Tenía como 16 y tuve que trabajar en una pesquera, donde alcancé a estar un mes. Cuando tenía 17 años nació mi primer hijo. A los 22 años entré a trabajar al restorán Bohemia (…). En ese local trabajaba por 120 mil pesos y, además, ganaba las propinas de los clientes. Yo en el Bohemia no me prostituí ni ejercí el comercio sexual».

Tras esta primera declaración de Nabila, ella confirmó que al saber lo que le pasó, su primer pensamiento fue proteger a Ortega. Pero la dura realidad a la que debe acomodarse ahora, dio el puntapié a su relato, que ayudará a esclarecer todo el tema ante Fiscalía.