Kayleigh Haywood tenía apenas 15 años cuando fue la protagonista de una escalofriante historia. El caso que conmovió a Inglaterra es uno que, como tantos, se podría haber evitado perfectamente. Y nos hace cuestionar el uso y confianza que le damos a las redes sociales hoy en día.
Dos sujetos contactaron a la menor de edad a través de Facebook, haciéndola caer en su trampa. Cuando se conocieron, tomaron a la chica y la violaron, secuestraron y la metieron a prisión con falsas acusaciones.
No les pareció suficiente, pues días después de ingresar a la cárcel la asesinaron de manera brutal mientras intentaba escapar. Stephen Beadman era uno de los crueles hombres tras este plan. Últimamente se revelaron imágenes del sujeto, que muestran lo difícil que fue para la joven intentar salvarse.
Kayleigh atacó a quien la capturó usando sus uñas e incluso un ladrillo. Nada de esto fue suficiente para que pudiera escapar. Finalmente Beadman la mató y escondió entre unos arbustos.
Las imágenes corresponden al registro policial tras ser identificado como uno de los asesinos de la niña. En una de estas, se encuentra en la audiencia sobre el mismo caso.
Lucas Harlow era el cómplice de Beadman, quien ayudó a iniciar este crudo crimen. Él confesó haberse contactado con la joven a través de Facebook, y engañarla para que fuera a su departamento. Aquí fue donde emborrachó a Kayleigh y la violó. Apenas se conocían hace dos semanas, en las que habían conversado algunas veces.
Si bien la inocencia o decisiones de la adolescente fueron las que detonaron esta horrible sucesión de hechos, ambos sujetos no tuvieron compasión. Y podrían haber repetido su estrategia con otras chicas.
Mientras la retenían en el departamento de Harlow, la niña intentó escapar, pero fue descubierta por su futuro asesino, Stephen Beadman. Hoy él arriesga una cadena perpetua, incluyendo los cargos por violación y asesinato de menor de edad, sumado al secuestro y al encarcelamiento falso.
Su vecino y cómplice, Lucas, también correría con su propia condena, por acoso y tocaciones a la menor. El veredicto se dará a conocer a fines de esta semana.
Este caso no ha dejado a nadie indiferente, en especial a aquellos jóvenes que aceptan solicitudes sin chistar, y a los padres de los mismos.
Por su parte, la Asociación Nacional de la Prevención de la Crueldad contra los Niños en Inglaterra, declaró que:
«Este caso impactante es un crudo recordatorio de los peligros que enfrentan los jóvenes en las redes sociales. Kayleigh fue acosada por un pedófilo predador que ya había intentado, sin éxito, atraer a otras dos chicas de 15 años de edad. Su muerte trágica es un ejemplo de la forma en que el mundo online es cada vez más utilizado por los abusadores«.