Últimamente cualquier tipo de reto en las redes sociales se vuelve viral. Ahora está de moda lo fitness, y con ello, el desafío de la plancha. Este es un ejercicio fácil pero para el que se necesita persistencia, para ver resultados, los cuáles son muy efectivos y toman poco tiempo.
Debido a que no necesita mucho, lo puedes realizar en todas partes, incluso en el trabajo. Para ello, debes colocarte boca abajo, sosteniéndote de la punta de tus pies y antebrazos, en posición recta durante varios segundos, que pueden ir aumentando.
El reto consiste en hacer este ejercicio durante 30 días, por lo que vas aumentando el tiempo cada vez que lo haces.
Leah Wynalek quiso probar los resultados en primera persona, y documentar su proceso en Prevention, revista para la que escribe. Ella decidió hacerlo dos veces en el día, y ocupaba tiempos libres en su oficina para poder descansar y recargarse. Eso sí, su duración promedio es más alta de lo que algunos pueden realizar el primer intento: 1 minuto y medio.
Leah practica yoga, corre y además suele andar en bicicleta, lo que la ayudó a la hora de durar más haciendo planchas. Pero sí era un desafío para ella hacer ejercicios en espacios cerrados. Comenzó el desafío, pero a los días empezó a cambiar sus pies de postura, moviendo sus piernas.
Pensó que sería fácil, pero de todos modos le costó mantener tu tiempo. Era inevitable que al tener la postura correcta temblara y esperaba ansiosa a que terminara el tiempo.
En su caso, como en el de muchos, le cohibía hacerlo en la oficina, pero de a poco cobró confianza, además de tener una oficina con puerta que podía cerrar sin que la vieran.
Con el tiempo no sólo olvidó la vergüenza, sino que también se le facilitó mantener su postura, y con las semanas esto fue mejorando.
Leah afirma que fue una gran manera de liberar tensión laboral en la oficina, y cargar las pilas. Y claramente tuvo resultados en su zona abdominal, no tanto como músculos visibles, pero sí se sentía distinta.
«Literalmente sentía que se iba toda la tensión acumulada por sentarme en mi escritorio en el día. Estaba sorprendida con el impulso de energía que sentía tras un corto período de ejercicio físico».
Así que sí es efectivo. ¿Estás listo para probarlo por ti mismo?