Esta es la historia de Elizabeth Rasmuson una joven que quiso sentar un precedente con su vestido de graduación, por lo que elaboró un vestido original, hecho pro ella misma y con material reciclado.
Para lograrlo, primero hizo un patrón para el vestido y luego comenzó a recortar el material elegido para crearlo: envoltorios de goma de mascar, los cuales tuvo que aplanar y recolectar.
Con la ayuda de su novio recolectó cuántos envoltorios pudo… los bordó y planchó y luego los recubrió con un tipo de plástico para prevenir que el vestido se rompiera. Noo gastó en vetsidos caros y ayudó con su iniciativa a crear consciencia sobre lo que vestimos, lo desechable de lo que consumimos y cómo podemos ayudar con pequeños gestos a crear consciencia sobre el consumismo y el daño que éste le hace al planeta
También hicieron algo para su novio.
Aquí puedes ver todo el proceso y su historia:
[jwplayer player=»1″ mediaid=»287306″]