El mes de diciembre ha estado marcado por la presencia de Mercurio retógrado, algo que hace que las cosas se vean más dificultosas.
Además, Saturno está terminando su tránsito por Sagitario, lo que nos recuerda que es preciso estar centrados y que no es bueno dejarse llevar por los miedos que se generan por los cambios que se avecinan.
Sumado a eso, hay luna nueva, lo que nos recuerda que hay limitaciones que sólo nosotros nos creamos. Sagitario está estrechamente relacionado con la filosofía y las ideas, es por eso que es un momento ideal para pensar todo de una forma más abierta, salir de los prejuicios y atreverse a lo desconocido.
Esta luna invita a hacerse la pregunta sobre los vínculos que hemos estado generando, si realmente nos están nutriendo. Es bueno conocer a otras personas con otros intereses para así poder entender que hay muchas interpretaciones sobre la realidad.
Sumado a esto, Júpiter -que es el planeta regente de Sagitario- se encuentra en Escorpio. Esto quiere decir que es un buen momento para explorar nuestro interior, sanar y sacar lo que está oculto dentro de nosotros por temor.
En conclusión, este es un buen momento para revisar y reestructurar lo que no está funcionando como queremos, de liberarnos de lo que nos atemoriza, pero siempre tomando decisiones con tranquilidad para que así amplíen nuestra mente y no nos ocasionen más trancas.
No hay que tenerle miedo a lo nuevo y tampoco a enfrentar las cosas. Siempre recuerda tener la seguridad de ser quien realmente eres. No pierdas la confianza en ti.
¿Qué te parece?