Una increíble e insólita historia es la que le ocurrió a Chris McCabe, un carnicero británico de 70 años, que se salvó de la muerte gracias a nada más ni nada menos que una prieta congelada.
Este hombre contó su ‘anecdótica’ historia a la cadena BBC, espacio donde aseguró que, como cualquier día, quería cerrar su carnicería, sin embargo, un mal cálculo hizo que se quedara atrapado en la habitación donde se congelan las carnes.
El terrible error que cometió hizo que entrara en un estado de desesperación, pues al querer apretar el botón para abrir la puerta, éste se había trabado debido a las bajas temperaturas que habían dentro de la habitación las cuales registraban -20°C.
Es por eso que, dentro de su temor a perder la vida, comenzó a buscar algo que lo pudiera ayudar a salir de aquel terrible lugar.
«Nadie me escuchaba golpear. Pero una prieta salvó mi vida«, afirmó este carnicero al citado medio de comunicación.
Y así fue, pues mientras buscaba algún objeto en esa habitación que lo ayudara a golpear el botón con más fuerza, encontró una prieta congelada que pasaba 1,5 kilos.
«Tenía la forma adecuada. La usé como la policía utiliza los arietes para romper puertas. Era sólido, puntiagudo y le podía dar el suficiente peso«, agregó a su relato.
Finalmente, el hombre finalizó su historia comentando que tuvo mucha suerte de encontrar esa prieta en la congelada habitación. «Tuve suerte porque vendemos unas dos o tres cada semana y esa era la última que me quedaba«, relató.