Participar en los Juegos Olímpicos implica una gran preparación tanto a nivel físico como a nivel mental. Requiere de una serie de duros y constantes entrenamientos que solicitan horas de trabajo y entrega para dar lo mejor de sí en la cancha, en el agua, o en la pista.
Toda la preparación persigue alcanzar un objetivo común.

El fin de la incesante preparación se corresponde con lograr ganar uno de los mayores premios de lascompetencias: una medalla olímpica. Con eso estaría realizada y cumplida la promesa que se tiene con el país que representa cada participante.

Volver a casa con una medalla de oro, plata o bronce, debe ser uno de los sentimientos más deseados de los competidores, por eso tantos años y horas de entrenamiento. Pero nunca va a faltar quien prefiera facilitarse las cosas e intentar llegar a la meta por el camino corto y fácil, pero que en ningún caso es el correcto.

Algunos participantes deciden irse por la vía fácil, sin respetar las reglas.
Por supuesto, en cada disciplina hay reglas que deben seguirse y cumplirse para que se realicen con éxito y se corone al ganador legítimo. Pero cuando una o más de las ovejas se sale del rebaño, todo se puede venir abajo no sólo para él o ella, sino que para el equipo completo o para el país al que representa.

Las estafas, ya sea el consumo de drogas para mayor resistencia o uso de elementos prohibidos,casi nunca terminan bien. De ser descubiertas y comprobadas, pueden ser motivo suficiente parallevar al competidor a a cárcel.