Uno de los más famosos y creíbles científicos de todos los tiempos, Isaac Newton, entre sus múltiples estudios, llegó a predecir que el fin del mundo ocurrirá en 2060.
Newton basó su apocalíptica teoría tras estudiar profecías bíblicas, y el ‘Libro de Daniel’ (del Antiguo Testamento), por lo que en realidad no habló de una fecha calculada con la ayuda de la ciencia, explica el periódico ‘El Confidencial’:
«En una carta de 1704, conservada en la Universidad Hebrea de Israel se puede leer: ‘podría acabar después, pero no hay razón para pensar que pueda acabar antes'», publica el periódico.
Entre las múltiples fechas propuestas por Newton figuran también como años del fin 2344, 2090, 2132 o 2374 Sin embargo, el año 2060 aparece con mayor frecuencia en sus archivos,por lo que ha ganado más credibilidad entre los científicos.
Pero no hay que alarmarse, Newton no tenía en mente el fin de la humanidad como tantas películas de ciencia ficción nos han hecho imaginar, sino que se refería al advenimiento del «milenio» o en otras palabras, hablaba de la llegada de Cristo y el establecimiento de su reino.
¿Cómo llegó Newton a esta conclusión?
Considerando que en su época transformó la física, las matemáticas y la astronomía, formulando la ley de gravitación universal y las tres leyes de la dinámica (inercia, interacción y acción-reacción) que llevan su nombre, sólo queda concluir que cómo pensador y científico de otros tiempos, no cuenta con nuetra forma contemporánea de distinguir o crear una línea divisoria entre las ciencias exactas y la teología y el misticismo. Si no que consideraba que su estudio apasionado de la Biblia, lo conduciría a las soluciones de todos los secretos del Universo, ya que consideraba que el famoso libro ocultaba las claves de la historia de la humanidad.