Seguro que la australiana Chelsie Cookson no esperaba esta airada reacción de las redes sociales después de su particular regalo a un mendigo que se encontró en la calle. Y es que ella estaba segura de estar ayudando a este hombre…
Después de salir del gimnasio donde trabaja como entrenadora personal, Chelsie se encontró a Steven pidiendo en la calle —suponemos que dinero o comida—, pero la australiana decidió que ella sabía mejor que nadie lo que necesitaba de verdad.
Según Chelsie, lo mejor que podía hacer era un poco de deporte… y le dio un pase para su gimnasio. Las reacciones de los usuarios han sido bastante duras con la entrenadora, y le han echado en cara su peculiar regalo en vez de haberle ofrecido comida o un lugar donde pasar la noche.
Chelsie se ha defendido con una publicación que ha publicado en su cuenta de Facebook, en la que explica que “él mismo nunca se hubiera molestado en conseguirlo” y porque es “algo en lo que él no invertiría su dinero si lo tuviera“.
La joven aseguraba que el ejercicio es “la base del crecimiento mental y físico, que puede reducir la depresión y combatir muchas enfermedades psicológicas. Quise demostrarle lo fácil que es cambiar la vida de una persona“.
Para sorpresa de todos, Chelsie también ha confirmado que el hombre ya ha visitado el gimnasio acompañado de un amigo. Quizás no fuese tan mal regalo, ¿verdad?