Melania y Donald Trump han sido el centro de la atención desde que el actual Presidente de los Estados Unidos asumió su rol en la Casa Blanca. Sin embargo,hay que admitir que las miradas siempre han estado un poco más fijas en Melania quien, con sus gestos y palabras ha convencido a muchos de que no es feliz en su matrimonio.
Definitivamente somos muchas que no entendemos cómo puede estar emparejada con el hombre más sexista de la tierra, pero bueno, cada uno con su tema.
Durante el primer discurso que Trump dio en el congreso como presidente electo, mencionó a su esposa Melania para agradecerle por el rol que ha tenido durante su nueva carrera política algo que genero una ovación de pie de parte de los asistentes.
La Primera Dama terminó de pie, sonriendo nerviosa y dejando a la vista el elegante traje negro de dos piezas que llevaba. Muchos notaron que su sonrisa tentativa demostraba nerviosismo y no estaban tan equivocados, pues la experta en lenguaje corporal Judi James le aseguró al portal británico Mirror que Melania se siente “ansiosa y solitaria”.
“El lenguaje corporal de la Primera Dama realmente definió su rol en el congreso y es un rol que irónicamente es muy triste: Melania es aquella persona que está encargada de detener el show y a la que le aterra hacerlo. El show, claramente, es su esposo y a este hombre no le gusta que nadie sea más importante que él”.
Si bien Trump hizo una entrada teatral al congreso, Melania intentó prácticamente pasar desapercibida, viéndose muy consciente de sí misma y solitaria.
“Su expresión facial durante el momento en el que fue el centro de la atención pasó de ser una sonrisa de Hollywood a tener micro gestos llenos de ansiedad y también de sorpresa. Asintió con la cabeza un par de veces pero en general se veía como que quería que le dejaran de prestar atención a ella y se la prestaran a su esposo”.
James también indicó que Ivanka parecía sentir un poco de envidia al respecto pues si bien comenzó sonriendo ampliamente ante la ovación, su sonrisa se desvaneció cuando los aplausos continuaron y parecían no querer parar.
“Con respecto a la psicología de su ropa, parece como si Melania deseara combinarse con la marca Donald Trump… al usar este lenguaje corporal de bajo perfil y vestirse con el estilo de Trump demuestra que no quiere eclipsar a su esposo”.
¿Será que habrá dejado para siempre su liberal estilo?
Upsocl