Desde hace unos años, curiosamente, algunos animales han estado siendo diagnosticados con algunas enfermedades mentales que los humanos vivimos. Según Laurel Braitman, autora del libro Animal Madness, existen algunas enfermedades mentales que, de hecho, los animales y los hombres experimentamos similarmente (aunque también apunta a que no es del todo correcto intentar estudiar a los animales desde nuestros propios conceptos y lo que nos pasa).
Aquí algunas enfermedades, que según esta especialista, compartimos los humanos y los animales:
Corazón Roto:
Tanto en humanos como en animales está documentado cómo en algunos casos cuando muere un ser extremadamente cercano, también muere poco tiempo después su compañero. Lo anterior es corroborado, en el caso de los animales, sobre todo en zoológicos. El dolor de la pérdida de un ser querido, en ocasiones no puede ser soportado por el mismo organismo.
Locura:
La locura puede ser un término muy amplio, pero básicamente se refiere a perder capacidades sociales por un trastorno que nos impide volver del mundo interior hacia el exterior. Según esta autora, algunos perros pueden llegar a la locura por soledad; también, algunos animales que han llevado una vida de abuso pueden llegar hasta este trastorno.
Desórdenes Obsesivos Compulsivos
¿Alguna vez has visto a tu perro hacer cosas que no solía hacer como rascarse frenéticamente alguna parte del cuerpo o algún pájaro que comienza a desplumarse de un día a otro sin parar de hacerlo?. Lo anterior también tiene qué ver con el mismo desorden que los humanos experimentamos.
Fobias
Sí, las fobias existen tanto en humanos como en animales, y estas pueden ser tan extrañas y absurdas en ambos casos. Los caballos pueden desarrollar fobias a las bolsas de plástico, por ejemplo. Por su parte se ha documentado cómo algunos gatos han desarrollado fobias por algunas cucharas, o algunos perros a las tormentas de relámpagos. La solución tanto en animales como en humanos es la terapia.
Desórdenes de estrés post- traumático
Un animal al que se le expone a un estrés o a vivencias traumáticas, como usarlo para experimentos farmacéuticos o enfrentarlo a un arduo entrenamiento para circo, puede posteriormente vivir una enfermedad como esta, y es justo una reacción a una vivencia fuerte como en el caso de los humanos.