1.- Deformidad de la córnea
Mark A. Swanson, miembro de la American Academy of Ophthalmology, dice que frotarnos el ojo con intensidad y de forma continua, puede causar el desarrollo de queratocono, una afección que altera la estructura interna de la córnea, en pocas palabras, la deforma. Disminuyendo la visión y hasta puede formar cicatrices.
2.- Infecciones
Debido a nuestras actividades del día a día, en nuestras manos abundan 150 diferentes tipos de bacterias y gérmenes. Por eso, al frotarnos los ojos, podemos ocasionar conjuntivitis u orzuelo,
3.- Lesiones
Al frotarnos los ojos, podríamos dañar la córnea de forma permanente. Asimismo, si la picazón es causada por alergias, el roce puede liberar histaminas (alérgenos) alrededor de los ojos y hacer que la sensación de picor empeore.
4.- Ojos rojos
Al sentir picazón, podríamos frotarnos los ojos de forma brusca, ocasionando que los vasos sanguíneos se lleguen a romper, lo que resultaría tener ojos rojos e irritados. Asimismo, con el tiempo, esto puede dar a la mirada un aspecto de cansancio y oscurecimiento alrededor de ellos.
5. Aparición de línea de expresión
Los especialistas aseguran que dado que el área alrededor de los ojos es la zona más delgada y sensible de la cara. Al frotarnos los ojos, podemos causar que nuestra piel se estire y generemos finas líneas de expresión.
6.- Pacientes que sufren miopía o glaucoma
Frotarse los ojos puede empeorar su visión, ya que al hacerlo se ejerce mayor presión y se reduce el flujo sanguíneo.