8 datos científicos sobre los hijos únicos

Dicen que la familia grande es más feliz. Hablan sobre la convivencia con los hermanos será lo que marca tu desarrollo y carácter, que sin ellos no tendrás quién te proteja o que tus Navidades y otras festividades serán aburridas.

También resulta un tema incómodo para los padres, ya que tomar la decisión de sólo tener un hijo por cuestiones económicas o simplemente porque lo desean, resulta una cuestión que en nuestra sociedad podría ser mal vista porque debe haber más de dos luceros que sean la luz de sus ojos.

Los mitos que se hacen alrededor de las familias con un sólo hijo son muchos, pero hay datos científicos que aclaran el panorama, tanto para padres, como para quienes crecen sin un hermano a su lado.

Si eres hijo único podrás identificarte con estos datos científicos, ver los puntos negativos, pero también corroborar que no todo es tan malo como lo pintan.

Los hijos únicos son más felices

Un estudio del Instituto de Investigación Económica y Social de Estados Unidos encontraron que la rivalidad entre hermanos hace a los niños infelices. Los casos de los niños estudiados reportaron abuso de bullying por sus hermanos mayores o menores, lo que los hacía tener más problemas para desarrollarse, al contrario de los hijos únicos que crecen en hogares con más amor y menos estrés.

Tienen problemas en el jardín de niños

El estigma de los hijos únicos hace que sean vistos con lástima por la sociedad creyendo que son niños solitarios lo que los hace pensar que tendrán más problemas cuando crezcan. Los que no tienen hermanos pelean con mayor facilidad.

Aumentan los índices de divorcio

El vivir solo con tus padres te hace ver más de cerca la relación que llevan y cómo se comportan con los demás. El hecho de que haya hermanos en casa provoca que los padres no se divorcien tan fácilmente, ya que tienen que pensar en más confrontaciones emocionales y no sólo en una persona.

Podrían ser criminales

Un estudio que se hizo en Finlandia a personas con patrones criminales de conducta, encontró que los índices se elevaban en personas que eran hijos únicos y más si eran hombres.

Obtienen mejores calificaciones

Un estudio hecho por el American Sociological Review arrojó datos sobre cómo los hermanos dañan el potencial académico de sus otros hermanos. De hecho, entre más hermanos tengas, más difícil es obtener buenas calificaciones. Mientras más grande sea la familia, menores son las posibilidades de poner la atención que merecen a cada uno.

No son tan solitarios como parecen

A partir de que se reconocen como individuos, que es a la edad de 6-7 años, los hijos únicos tienen las mismas posibilidades y aptitudes para hacer amigos que una persona que siempre está rodeado de sus hermanos.

Suelen ser un poco más depresivos

No se da en todo los casos, pero lo cierto es que los hermanos te ayudan a tener una mayor confianza en ti mismo por el hecho de crecer en el mismo estorno. Te identificas y no te sientes tan solo.

Son más agradables que sus compañeros

Susan Newman, psicóloga experta en hijos únicos, explica que sus sujetos de estudios tienden a ser personas que se quieren incluir en la sociedad, por lo que su temperamento es más liviano y relajado.

Ya sea que tengas hermanos o no, todos los datos pueden tener variantes, ya que los casos de estudio tienen diferentes factores a estudiar, lo que quiere decir que no todo tiene que ver directamente contigo.

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