A 7 mil metros de altitud una mujer dio a luz a un niño prematuro, la pasajera de la aerolínea rusa Ural Airlines nombró al niño Uralbek, en honor a la compañía.
Aunque los partos en el aire no son considerados como una situación de emergencia, el conocimiento del personal de las aerolíneas sobre qué hacer en tales escenarios es más teórico que práctico, así lo aseguró Tatiana Yúrieva, azafata y quien estuvo presente en el parto.
El vuelo cubría el trayecto de Osh (Kirguistán) a Ekaterimburgo (Rusia) «fue el debut de toda la tripulación, incluído los pilotos» indicó Yúrieva
Tatiana Yúrieva, es una médico que se convirtió en azafata hace tan solo tres meses, «se trató de un alumbramiento prematuro, ya que la madre esperaba el parto para el mes de agosto».
«Por tener más experiencia, me ocupé yo de ayudar al parto. Toda la tripulación me asistió, por no hablar de los pasajeros que me ofrecieron su ayuda», recordó la doctora
Mientras que el avión estaba regresando a Osh, la tripulación levantó rápidamente unas pantallas especiales en primera clase para tapar la escena y poder afrontar la tarea con más tranquilidad.
Poco más de dos kilogramos de peso» fue lo que pesó el bebe», la azafata manifestó que el equipo coordinó todo bien, indicó que presumió que el niño era de siete meses de embarazo al verlo tan pequeño.
Todavía se desconoce qué nacionalidad tendrá el recién nacidoUralbek: los padres son uzbekos residentes en Rusia, pero el parto tuvo lugar en el espacio aéreo de Kirguistán (nación asiática), desde donde estaban regresando tras visitar a unos parientes.
La azafata contó que la aerolínea está preparando un obsequio para el bebé, pero el tipo de regalo que será se mantiene por ahora en secreto.