El jengibre es una planta aromática que se ha utilizado desde la antigüedadcon varios fines culinarios y medicinales.
Se trata de un tubérculo de sabor picante que, por su versatilidad, ha hecho parte de la cocina de miles de personas en todo el mundo.
Contiene gingerol, una sustancia activa a la que se le atribuyen efectos antiinflamatorios, analgésicos y antioxidantes.
También es una fuente rica de aceites esenciales, vitaminas y aminoácidos que le proporcionan al organismo una amplia variedad de beneficios internos y externos.
Si bien muchas de sus aplicaciones han hecho parte de la medicina alternativa oriental, en la actualidad se han extendido en todo el mundo por su capacidad para mejorar la salud.
A continuación queremos compartir sus principales beneficios y la popular receta de agua de jengibre para disfrutar sus propiedades.
¡Apunta!
Propiedades nutricionales del jengibre
La raíz de jengibre es una prodigiosa fuente de nutrientes que se pueden aprovechar para proteger el organismo y combatir varias enfermedades.
Cuenta con aceites esenciales como el limonelo, el citronelal y el gingerol, los cuales le confieren una parte importante de sus efectos positivos en la salud.
El gingerol es el más destacado ya que, además de darle su sabor picante, es un potente antiinflamatorio que apoya el tratamiento de patologías como la artritis y la artrosis.
También contiene vitamina C, del complejo B y minerales como calcio, cromo, aluminio y fósforo.
Entre sus componentes también cabe destacar que contiene ácido linoleico, aminoácidos como la niacina y el triptófano y enzimas como la proteasa y el zingibaina.
Beneficios del agua de jengibre
El agua de jengibre es una bebida curativa que concentra todos los nutrientes de este tubérculo combinados con los del limón y la miel de abejas.
Dado que tiene un poderoso efecto antiinflamatorio, analgésico y calmante se recomienda para aliviar las cefaleas, las migrañas y la tensión asociada con el estrés.
Está comprobado que puede bloquear los efectos de la protasgladina, una sustancia que causa migrañas al producir una inflamación en los vasos sanguíneos del cerebro.
También es un excelente tónico digestivo, ideal para lidiar con los problemas gastrointestinales comunes como los gases, el dolor y la indigestión.
Sus compuestos activos estimulan la circulación sanguínea y evitan la formación de venas varices o arañas vasculares.
Es uno de los mejores remedios naturales contra el dolor articular y muscular, ya que sus gingeroles desinflaman y generan una sensación de alivio.
De hecho, consumido en dosis moderadas cada día, combate los síntomas de la artritis reumatoide, la osteoartritis y otras afecciones inflamatorias crónicas.
Además, dado que es muy baja en calorías, representa una opción saludable para acelerar el metabolismo y bajar de peso con más facilidad.
¿Cómo preparar agua de jengibre?
La preparación de agua de jengibre no tiene mucha ciencia y tampoco requiere ingredientes costosos o imposibles de conseguir en el mercado más cercano.
El resultado es una bebida hidratante, antiinflamatoria y perfecta para aliviar las dolencias que suelen aparecer a lo largo de la jornada.
Ingredientes
- 5 cucharadas de jengibre fresco (50 g)
- 3 tazas de agua (750 ml)
- El jugo de ½ limón
- 2 cucharadas de miel de abejas orgánica (50 g)
Instrucciones
- Toma la raíz de jengibre fresca, lávala bien y pásala a través de un rallador de alimentos.
- A continuación, pon a hervir el agua y, cuando llegue a ebullición, agrégale el jengibre.
- Déjalo a fuego mínimo durante dos minutos y apaga.
- Exprime el jugo de medio limón y agrégale la miel de abejas orgánica.
- Puedes consumir esta infusión tibia, aunque también puedes dejarla reposar en el refrigerador para tomarla fría.
- Bebe dos o tres tazas al día.
Contraindicaciones
A pesar de que el agua de jengibre tiene muchos beneficios, cabe añadir que en ciertos casos no es recomendable su consumo.
Por ejemplo, no se debe ingerir en caso de úlceras duodenales, colitis o enfermedad de Crohn ya que, como están activas, pueden empeorar el dolor.
Tampoco es conveniente tomarla durante el embarazo porque algunos de sus compuestos pueden interferir en la formación hormonal del feto. En caso de usarla para calmar las náuseas, es mejor consultar al médico encargado del control prenatal.
Se debe consultar con el especialista en caso de estar tomando medicamentos para la diabetes o el sistema circulatorio.
Muchas de las sustancias activas del jengibre pueden alterar los efectos de este tipo de fármacos.
Fuente: Mejorconsalud