Nick Carter: conquistó a toda una generación por ser el rubio carilindo del grupo teen-pop más emblemático de los ´90. Pósters, tapas de revistas, stickers, todo llevaba su rostro o una fotografía de los Backstreet Boys.
La fiesta se terminó en los 2000 cuando la boy-band comenzó a descender de la cresta de la ola hasta perderse de vista luego del disco de 1999 Millenium. Nick, en cambio, siguió acaparando las tapas de la prensa del espectáculo: su romance con Paris Hilton no cejaba en ruidosos escándalos que se convertían diariamente en noticias.
Pero parece que su peor momento fue en 2012 cuando su hermana menor, Leslie, perdió la batalla contra las drogas y murió de una sobredosis. Carter,el mayor de cinco hermanos, confesó en su autobiografía Facing the music and living to talk about it (Enfrentar la música y vivir para contarlo) que se culpaba a sí mismo por el fallecimiento de Leslie, ya que él había sido un gran consumidor de drogas.
«Siempre sentí mucha responsabilidad para con mis hermanos. Me converí en el padre. Hice más plata de la que mi padre hizo a los 14, 15 años. Era el sostén de mi familia», comentó Carter en un talk show en el cual también habló sobre su propia adicción: «Un día me miré en el espejo y no me pude reconocer. No sabía quién era. Recuerdo haber pensado ‘esto no es lo que quiero ser. No es lo que merezco ser’. Y tomé la decisión de no dejarme caer en la depresión, de pelear».
Y peleó. Hoy Nick está felizmente casado con Lauren Kitt, los Backstreet Boys están unidos otra vez (hasta se rumorea una gira con las Spice Girls) y, actualmente, es uno de los participantes del popular reality show Dancing with the Stars.