Un reciente estudio de la Universidad de Zurich revela que las mujeres cooperamos, compartimos y empatizamos más que los hombres dada nuestra respuesta cerebral al comportamiento prosocial.
Los cerebros masculino y femenino procesan el comportamiento prosocial de manera diferente, esto es la capacidad de relación con los demás de manera positiva. Neurocientíficos de la Universidad de Zurich acaban de publicar un estudio en el que apuntan que, para las mujeres, el comportamiento prosocial provoca una señal de recompensa más fuerte en su cerebro, mientras que el masculino responde más fuerte a un comportamiento egoísta.
¿Quiere decir esto que el cerebro masculino tiende al egoísmo y el femenino a la amabilidad?
Según esta teoría, sí. El estudio manejó una serie de experimentos conductuales dentro de un grupo de prueba de 56 hombres y mujeres que implicaron tomar decisiones sobre si compartir dinero o no y otras cuestiones similares y, las áreas del cerebro que se activan cuando se toman estas decisiones «desinteresadas» y prosociales son diferentes y actúan distinto.
Wonderwoman
Así es la ciencia. Alexander Soutschek, pionero en el estudio, ha señalado en la nota de prensa publicada en la web de la Universidad de Zurich la necesidad de que los neurocientíficos tomen más en serio las diferencias de género. «Estos resultados demuestran que los cerebros de mujeres y hombres también procesan la generosidad de forma diferente a nivel farmacológico».
Nosotros esperemos que la ciencia continúe investigando y nos ayude, así, a entender el complejo e ininteligible cerebro humano.