Películas como Saw, Hostal o Hellraiser, se han convertido en referentes de un formato de película de terror basada en espacios cerrados, abundantes en sangre y mecanismos de tortura, las que público pareciera siempre recibirlas con mucho interés.
En San Diego, Estados Unidos y remedando estas retorcidas fantasías se encuentra una de las casas del terror más extremas existentes. Se trata de McKamey Manor, se trata de un tour de mínimo 2 horas de encierro en donde los participantes son sometidos a pruebas como ser atados, estar expuestos a arañas, serpientes, gritos, sustancias extrañas que les meten en sus bocas y sicópatas tratando de asfixiarlos en cada momento.
Las condiciones para poder acceder esta perturbadora casa son tener más de 21 años, participar en un grupo de 4 personas y firmar un contrato en donde se asumen los vejámenes y posibles consecuencias futuras de este retorcido viaje.