Luego de un cierre de año cargado de fiestas, comida, regalos, encuentros y felicidad en familia y con amigos, enero se nos aparece de golpe como un mes donde debemos empezar a hacernos cargo de todo lo que descuidamos las semanas pasadas.
Cuentas, kilos extras, cansancio acumulado y la temporada de vacaciones que no llega son motivos suficientes para que nuestro ánimo decaiga y empecemos a tomar conciencia que el trabajo sigue allí y que las cosas no han cambiado mucho.
Sumado a lo anterior, aparecen las famosas «resoluciones de año nuevo», aquellos nuevo hábitos que nos propusimos iniciar con la llegada de otro año y que a veces son más difíciles de conseguir que lo que pensábamos.
Este «Lunes triste», ocurre el tercer lunes de cada mes de enero y el término fue acuñado por el psicólogo británico, Cliff Arnal, en por El autor de este calificativo es Cliff Arnal, en el año 2005. Esto, luego que una compañía de viajes lo contratara para poder hacer un estudio de sus clientes y desarrollar una fórmula que permitiera determinar en qué fecha es cuando nos sentimos más tristes o desdichados.
Sin embargo, ¿es realmente posible que una fecha pueda determinar nuestro estado depresivo? De acuerdo a psicólogos y científicos, el «Blue Monday» sería un concepto propio de una «pseudociencia», mientras que el término ha sido rechazado por otro grupo de académicos.
No obstante, ya sea cierto o una mera invención sabemos que el periodo posterior a las fiestas y previo a las vacaciones puede ser un poco duro, por ello te dejamos algunos consejos para que puedas enfrentar exitosamente cualquier indicio de tristeza, en cualquier día de la semana.
#1 Escucha música a todo volumen
Una buena opción para la liberación de endorfinas y una consiguiente sensación de felicidad.
#2 Rodéate de gente alegre
De acuerdo a una publicación de la revista The journal Proceedings of the Royal Society B, el buen humor sí puede contagiarse. Por ello, este tercer lunes puede ser un buen momento para organizar actividades distintas junto a tu familia y amigos.
#3 Haz deporte
Además de ser bueno para nuestra salud y contribuir a un buen estado físico, nuestra salud mental también se beneficia. Esto, gracias a la liberación de endorfinas, neurotransmisores que conducen a un estado de felicidad.
#4 Vigila lo que comes
Nuevamente las endorfinas cumplen un rol fundamental en nuestra felicidad. Algunos alimentos son necesarios para producir neurotransmisores como las endorfinas o la serotonina, por lo que incorporarlas en nuestra dieta diaria es una excelente opción.
#5 Ríete mucho
Está demostrado que reírse contribuye a evitar pensamientos negativos y que, además, reduce los niveles de estrés a los que estamos sometidos.
Con información de Muy Interesante.