(Fotos) Los uniformes de trabajo de estas camareras han desatado el enojo de todos debido al ser considerados indecentes

El “Bikini Beans Café” de Washington, está dando mucho que hablar y gracias a ello su popularidad ha subido como la espuma. A todas horas, una larga fila de personas (sobre todo del género masculino) esperan pacientemente a que las camareras les sirvan su café en ropa interior.

¡Los fans de este bar ya se cuentan por millares! La idea de montar este negocio partió de su propietaria, Carlie Jo, que defiende que sus camareras no son mujeres objeto sino que contribuyen a la causa de las mujeres: “al ser el primer café bikini en Arizona, queremos que las mujeres se sientan dueñas de su imagen y estén a gusto con ellas mismas”.

«Las mujeres de todo el mundo ya tienen derecho a votar, a ser gays, a ser líderes de su comunidad y a ser propietarias de empresas. ¡Incluso pueden convertirse en presidentas! Nosotras tenemos el derecho a trabajar con gracia, confianza y dignidad, ya sea con un traje de chaqueta o en bikini.” Estas palabras circulan por Internet, escritas a mano por la propietaria.

Aunque no hay duda de que la mayoría de los hombres están de acuerdo con este tipo de negocio, los compañeros del sector lo tachan de competencia desleal y cuestionan las formas. Mike Fagan representante del consejo municipal, intenta imponer unas limitaciones a los códigos de vestimenta de los profesionales que trabajan de cara a la gente. Según Fagan, el Bikini Beans hace apología de la explotación e instrumentalización de las mujeres.

Mike Fagan añade: “El negocio debería basarse en el café y no en el body de las mujeres. No me refiero al tema de que se impida que las mujeres vayan en top less en el bar “para proteger a los niños”, pero sin duda, no es el mejor ejemplo para ellos.

Otras personas también creen que el bar es una especie de “casa de citas para hombres”. Sin embargo, la propietaria persiste en sus palabras: “Hay familias completas que vienen al bar con sus hijos. ¡Incluso estoy pensando en construir una ludoteca! Yo no creo que ver a estas mujeres sea ofensivo para los niños. Creo que hay motivos mucho más graves para sentirse ofendidos que ver a unas mujeres sirviendo copas en bikini”.