“Espero que todas las personas de Weston aprovechen la oportunidad de, una vez más, pararse en un charco de agua mugrienta comiendo papas frías mientras escuchan el sonido de niños llorando”.
–Banksy
Banksy no es un artista de la mediocridad; el personaje enigmático ha creado una revolución artística en pleno siglo XXI, pero su revolución poco ha tenido que ver con la estética de sus obras o el mensaje que explota cada una de ellas. Banksy ha transformado su persona en un personaje. La persona que ahora está íntegramente inmerso en la cultura popular, no puede sino explotar la situación de la mejor forma posible.
Justo en el momento en el que los parques de diversiones regresan a estar en boca de todo el mundo, el artista urbano inglés ha creado su propio parque temático llamado Dismaland. Ubicado en Weston-super-Mare, el parque tiene la característica irreverente del artista: la protesta social. Pero si hay algo más que se puede decir de este lugar, es lo sombrío que parece.
Dentro del parque, que tuvo una construcción bastante secreta, se pueden encontrar más de 50, 10 de ellas pertenecientes al autor del parque, mientras que las otras son de la autoría de Damien Hirst, Jenny Holzer, Jeff Gillette y más. Entre las obras se encuentra un castillo siniestro que rememora al parque de diversiones de Disneyland, una estatua de Ariel que parece estar en un eterno glitch y un barco de gente refugiado cruzando una piscina de un lado a otro.
Banksy ha aclarado que más que una crítica lugares como Disney, se trata de un proyecto con el que busca mostrar a quienes considera los mejores artistas del momento; a excepción de dos artistas que lo rechazaron. Hasta ahora el artista se ha negado a decir sus nombres.
Mientras se visita el tétrico y deplorable parque, en el que la gente encargada de ayudar permanece en un completo estado de apatía para dar la impresión esperada del lugar, se pueden escuchar por los altavoces cosas como: “Recuerda, la ambición es tan peligrosa como la complacencia”.
Según el artista convertido en curador, las obras son parte de algo a lo que él llama pormodern-ismo. Las piezas del parque realmente necesitan de la gente para interactuar; por ejemplo, la carreta de Cenicienta no es como la que se conoce de Disney, en la de Banksy, se ve un accidente de que sólo ocurre cuando la gente toma fotografías de la estatua, lo que realmente explota el potencial de la obra.
Banksy autofinanció este proyecto, por lo que espera que cada persona que vaya compre tres playeras y una taza. Así que cualquiera que esté esperando los nuevos parques de diversiones de Star Wars o el parque temático de Harry Potter en Londres, puede aprovechar para ir del 22 de agosto al 17 de septiembre a Dismaland.